El ex general Doron Almog elegido para dirigir la Agencia Judía, llama a la unidad

El comandante de las FDI convertido en activista de la discapacidad asume el control de un grupo casi gubernamental después de un año de búsqueda de un nuevo presidente; destaca el orgullo judío y la centralidad de Israel en el discurso inaugural.

El ex general de las Fuerzas de Defensa de Israel, Doron Almog, fue elegido por unanimidad para dirigir la Agencia Judía para Israel el domingo por la mañana y se comprometió a apuntalar la unidad judía y la centralidad de Israel en su discurso inaugural.

“Queremos llegar al corazón de cada judío en la Tierra”, dijo Almog después de la votación en un gran salón de actos en el Hotel Orient de Jerusalén.

La elección de Almog por parte de la junta de gobernadores de 120 miembros de la Agencia Judía puso fin a una búsqueda agotadora y en ocasiones polémica de un año para reemplazar al presidente anterior, Isaac Herzog, quien dejó la organización para convertirse en presidente de Israel. En la misma reunión del domingo, Mark Wilf fue elegido presidente de la junta de gobernadores de la Agencia Judía, en sustitución de Michael Siegal.

Almog, de 71 años, exjefe del Comando Sur de las FDI, ha dedicado su vida después de dejar el ejército a dirigir una aldea de rehabilitación ampliamente elogiada en el desierto de Negev para personas con discapacidades físicas y mentales. ADI Negev-Nahalat Eran lleva el nombre de su hijo Eran, que tenía autismo severo y discapacidades físicas.

Se espera que asuma oficialmente el cargo en septiembre. Reemplazará a Yaakov Hagoel, quien se desempeñó como presidente interino durante el año pasado.

Almog asume el cargo cuando la Agencia Judía está trabajando activamente para traer a Israel a miles de refugiados ucranianos y etíopes que huyen de las guerras en sus respectivos países y enfrentan una renovada oposición a sus actividades en Rusia por parte de las autoridades del país.

Almog fue una elección inesperada, ya que no expresó interés en el papel. Pero los representantes de las Federaciones Judías de América del Norte se acercaron a él para que lo asumiera, debido a su experiencia relevante y al hecho de que era ampliamente visto como un candidato de consenso con credenciales intachables, incluido un Premio Israel por su trayectoria. Fue nominado por unanimidad por el comité de selección el mes pasado.

En su discurso inaugural, Almog expuso la clave de sus principales objetivos: “Llegar al corazón de cada judío en la Tierra. Infundir orgullo en nuestro judaísmo y el Estado de Israel, la empresa más importante del pueblo judío desde 1948. Infundir orgullo en este milagro llamado Estado de Israel y sus extraordinarios logros en ciencia, tecnología, cultura, agricultura, medicina, sociedad, economía, ejército, aliyá y más”.

La conexión entre el Estado de Israel y la judería global es de importancia estratégica existencial

En sus comentarios, Almog también enfatizó la relación crítica entre Israel y los judíos globales, más notablemente en los Estados Unidos, refiriéndose a los judíos de todo el mundo como “hermanos y hermanas”.

“La conexión entre el Estado de Israel y la judería global es de importancia estratégica existencial”, dijo.

Almog agregó que esto ha sido así desde el comienzo del estado.

“Sin el apoyo de los judíos globales, encabezados por judíos estadounidenses y voluntarios extranjeros en la Guerra de Independencia, dudo que la generación de mis padres, la generación fundadora de Israel, hubiera sobrevivido”, dijo Almog, refiriéndose tanto al apoyo material como a los voluntarios que lucharon. en nombre de Israel.

Incluso antes de su elección oficial, Almog causó un pequeño revuelo al visitar el movimiento Reformista en la conferencia bienal de Israel, en uno de sus primeros actos después de ser nominado. En el evento, Almog mencionó la conexión de su familia con el judaísmo reformista: su hija celebró su bat mitzvah en una sinagoga reformista, lo que provocó una feroz reacción de algunos legisladores ortodoxos.

La elección de Almog fue aclamada por la ministra de Inmigración, Pnina Tamano-Shata, quien trabaja en estrecha colaboración con la Agencia Judía, que tiene la tarea de facilitar y alentar la inmigración judía a Israel, o aliyá.

“Estamos en un período importante con un aumento de nuevos inmigrantes de todo el mundo, y estoy seguro de que Doron contribuirá en gran medida al mundo judío y al cumplimiento de las políticas de inmigración y absorción del gobierno”, dijo Tamano-Shata.

Numerosos intentos de encontrar un reemplazo para Herzog fracasaron durante el año pasado ya que ningún candidato pudo obtener los nueve de los 10 votos necesarios para asegurar la nominación del comité de selección. Después de que 17 presidentes Ashkenazi de sexo masculino de la Agencia Judía se remontaran a su fundación, muchos esperaban que el próximo jefe de la organización aportaría un toque de diversidad al puesto.

“¿Hubiera sido mejor tener una mujer? ¿Hubiera sido mejor tener a alguien más joven? Sí. Todo eso es cierto, pero tienes que ir con el candidato que tienes”, dijo Siegal, el presidente saliente de la junta de gobernadores de la Agencia Judía.

“Este hombre tiene una carrera distinguida, se preocupa por las partes más vulnerables de la sociedad israelí, tiene capacidad para recaudar fondos y aporta un nivel de credibilidad en la sociedad israelí. No puedo decir que nadie más aporte esos niveles de calificación al trabajo. Simplemente no marca la casilla de diversidad para la sociedad actual”, dijo.

Almog se alistó en las FDI en 1969, sirviendo en la Compañía de Reconocimiento de Paracaidistas, incluso durante la famosa incursión de 1976 en Entebbe, y ascendió en las filas militares durante las siguientes tres décadas y media hasta el puesto de jefe del Comando Sur, retirándose en 2003. .

Después de su liberación del ejército, Almog estableció la aldea de rehabilitación, conocida como Aleh Negev, en gran parte debido a sus experiencias personales al cuidar a su hijo Eran, quien murió en 2007.

Almog estuvo en el centro de la controversia internacional en 2005 después de que activistas palestinos en el Reino Unido consiguieran que un tribunal emitiera una orden de arresto contra él por su papel en la demolición de una casa palestina en la Franja de Gaza, que según ellos equivalía a un crimen de guerra. .

Almog se enteró de la orden de arresto después de que él y su esposa aterrizaron en el Reino Unido. Para evitar un incidente, se quedó en el avión y voló de regreso a Israel en él. Posteriormente se rescindió la orden de arresto.

Fuente: The Times of Israel