Tzedaká para Rosh Hashaná – Rab. Tzví Grunblatt

Jabad Lubavitch como lo hace siempre, está ayudando a aquellos que más lo necesitan con una acción muy concreta. En este caso, frente a la llegada de Rosh Hashaná, lanzó una campaña específica para que la felicidad sea para todos, tener lo necesario para festejar, sobre todo, pensando en aquellos que tienen mayores dificultades.

Hablamos con el Director General de Jabad Argentina, el rabino Tzví Grunblatt para conocer detalles de este proyecto solidario.

El rabino Grunblatt deseó primeramente, comentar que cuentan con el trabajo de la Fundación de Ayuda Social de Jabad, permanente en sus diferentes departamentos: ayuda alimentaria, vivienda, salud, salud mental; además dos consultorios dentales, para asistir a los chicos de hogares que no pueden acceder a la consulta y a los que se les ofrece atención gratuita.

Fuera de todo eso, indicó que ahora, frente a la llegada de Rosh Hashaná se impusieron que “todo Yehudi pueda celebrar el principio del año con bendición, con alegría, espiritual y materialmente”. Para ello lanzaron una campaña especial destinada a tres mil personas para brindarles las dos comidas de las dos noches de Rosh Hashaná. “Comida me refiero a todo lo que ello implica: carne, pollo, pescado, vino, jugo de uva, jalot agulot, miel, manzana y materiales explicativos”, destaca con orgullo el Rabino.

Va a haber también lo que llaman “la caravana solidaria”, mediante la cual, la semana próxima van a visitar de manera personal unos 350 hogares.  Lo harán los voluntarios, personas que no solo quieren ayudar desde lo económico, sino que desean hacerlo a través de poner el alma, el cuerpo, llevar ese paquete que están distribuyendo, con una sonrisa, acompañando,  porque como lo dice el Talmud en el tratado de Baba Batra: “El que hace el bien hacia un necesitado recibe seis bendiciones, pero que junto con hacerle el bien, lo hace sentir bien porque le habla, le llega al corazón, le levanta el ánimo, recibe once bendiciones”, por lo cual el hecho de acompañar,  representa casi el doble de bendiciones.

Explica el rabino Grunblatt  que en estos días, Dios fija el destino para el nuevo año y que revisa las acciones de cada uno para darle un buen año, y que ahí es un momento en el que el pueblo judío, acrecienta mayor esfuerzo en la tzedaká, porque para despertar la tzedaká de Dios con cada uno, para despertar la misericordia de Dios, cuando estamos empezando el nuevo año y recibimos nuestra ketibá vejatimá tová, “nuestra inscripción”, necesitamos también hacer misericordia en la Tierra, estar, sentir por el otro, dar al otro, brindar al otro, darse por el otro, y que la acción del hombre aquí en la Tierra, compuesto de cuerpo y de alma, de espíritu y de materia, es espíritu aquí abajo en la Tierra, es el que despierta, como dice el Zohar, el espíritu en el Cielo. Remarcó que  acompañar al otro va en consonancia con esa costumbre judía de antaño en estos días previos a los Iamim Noraim, la de acrecentar todo lo relativo a la tzedaká, a hacer bien al otro, darle al necesitado porque es nuestro deber hacerlo.

“Cuando nosotros le damos y brindamos a otro, no por su mérito, sino por el solo hecho de que es nuestro hermano, entonces también Hashem nos da a nosotros, pues somos sus hijos; nos da un año bueno, un año dulce”, enseña.

Señala que esta campaña es una invitación primero para que cada uno, donde se encuentre, ayude a otro, ese es el objetivo, ayudar al semejante; y por otro lado, pide que los acompañen para fortalecer esta obra que están haciendo a través de la Fundación de Ayuda Social de Jabad Lubavitch

Estamos transitando tiempos difíciles en la Argentina, con una economía muy golpeada, y en la que seguramente hay mucha gente requiriendo ayuda. Al respecto el Rabino dijo que, por supuesto se ayuda a todos los que lo necesiten, pero que se necesita apoyar también, tal vez al que no está “tan apretados” económicamente pero que le cuesta acceder a tener un buen Iomtev (fiesta). Desde Jabad desean que tengan un poco de amplitud, que no tengan la angustia extra de lo que significa armar una cena festiva y que puedan disfrutar y vivir una fiesta como corresponde.

Para aquellos que pueden ayudar, el rabino Grunblatt pidió que por favor lo hagan, y que sepan que cada contribución va directamente al necesitado, que no están recaudando para otros fines. “Todo lo que recibimos enseguida se vuelca, porque la demanda es mayor que la oferta, y entonces todo lo que la gente pueda ayudar, va a incrementar la cantidad de hogares felices”, declaró. Y señaló que además de lo que envían a los hogares, se ocupan de brindar la parte tradicional, espiritual, lo que representa el Rosh Hashaná, escuchar el shofar, porque también tenemos que pensar que hay gente que se siente caída, desmoralizada, y que por eso no participa de la vida comunitaria, y que es allí donde dirigen su acción.

Por último, el Director de Jabad Argentina dijo que todo el que pueda ayudar se comunique con la Fundación Jabad:

1 Caja Familiar Especial
https://odd.org.ar/1-CAJA-ROSH-HASHANA-5784

2 Cajas Familiares Especiales
https://odd.org.ar/2-CAJAS-ROSH-HASHANA-5784

3 Cajas Familiares Especiales
https://odd.org.ar/3-CAJAS-ROSH-HASHANA-5784

“Cuando uno está sentado en Rosh Hashaná, en su casa, celebrando en familia y sabe que en ese momento hay otras familias que también están celebrando un nuevo año, gracias a su aporte, le endulza su mesa más de todos los manjares que pueda tener en su mesa, más allá de que esto trae más mérito para ser inscriptos y sellados un año bueno y un año dulce”. cerró Grunblatt

Redacción: Prof. Cita Litvak

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