¿La mano de Irán detrás de los autobuses que explotaron?

Un error de los terroristas ha evitado una nueva masacre en Israel. Se suponía que cuatro bombas colocadas en otros tantos autobuses iban a explotar esta mañana, “pero los temporizadores estaban mal ajustados”, informa el periódico Maariv.

Tres bombas detonaron en la noche, mientras los autobuses estaban parados, vacíos y sin nadie alrededor. No hubo heridos y el escuadrón antibombas intervino en el cuarto autobús, neutralizando la bomba. “Venganza de Tulkarem” es el mensaje, escribe Ynet, que los terroristas dejaron en una de las bombas.

Tulkarem es una de las ciudades del norte de Cisjordania donde las fuerzas de seguridad han intervenido en las últimas semanas con una gran operación antiterrorista. Aquí, especulan los periódicos, el ataque fallido a los autobuses habría sido planeado.

El Shin Bet detuvo a dos personas, entre ellas un ciudadano israelí, sospechosas de estar implicadas en el ataque. El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha dado instrucciones a las fuerzas de seguridad para que emprendan una operación masiva en Cisjordania contra los centros terroristas.

El Ministerio de Transportes ha ordenado la interrupción del servicio de transporte público y la realización de un registro de todos los autobuses, trenes y trenes ligeros. “Perseguiremos a los terroristas hasta el final y destruiremos la infraestructura del terror en los campos de refugiados utilizados como posiciones de primera línea del eje del mal iraní”, dijo el ministro de Defensa, Israel Katz. “Los residentes que den refugio al terror pagarán un precio muy alto”, advirtió Katz.

Incluso fuera de las fronteras de Israel, la alerta terrorista es alta. En Estambul, la policía arrestó a un ciudadano uzbeko que planeaba ataques contra sinagogas y escuelas judías en Turquía y en el extranjero, informaron medios locales. Se dice que el hombre está afiliado a ISIS y “no tenía antecedentes penales relacionados con actividades terroristas”, escribe el Jerusalem Post.