Se aprobó memoria del Presidente y se escogió nuevo directorio

El pasado 17 de abril, bajo la dirección de su presidente, Andrés Fosk, el Círculo Israelita de Santiago realizó su asamblea general extraordinaria y su asamblea general ordinaria, en las cuales se aprobaron la memoria anual, modificaciones a la composición del directorio y los nombres que dirigirán la institución en el próximo período.

En efecto, en la Asamblea General Extraordinaria se aprobó disminuir el número de directores de 19 a 15 miembros. Posteriormente, en la Asamblea General Ordinaria se aprobaron la memoria del presidente y el balance de tesorería, tras lo cual se procedió a la elección del nuevo directorio, que será presidido por Miguel Inflefd.

Miguel Infeld:
Directorio de continuidad y trabajo en equipo
“Para mí es un orgullo ser el presidente de Círculo y seguir en la construcción de todo lo que hemos logrado hasta ahora”, aseguró Miguel Infled, quien asumirá próximamente la presidencia del Círculo Israelita de Santiago, sucediendo a Andrés Fosk, quien se mantendrá en la vicepresidencia de la institución.

“Me siento muy comprometido con la institución, ya llevo 6 años trabajando con este grupo y puedo decir que este será un directorio de continuidad, que seguirá trabajando como un equipo para llevar adelante el plan estratégico que se diseñó hace cuatro años. Además, tengo una historia familiar que me une fuertemente al Círculo, de hecho, mi matrimonio fue con el rabino Eduardo, hemos vivido acá nuestras ceremonias de Bat Mitzvá, etc.”

-¿Cuál es el foco del plan estratégico que viene desarrollando el directorio de la institución?

-Este plan estratégico se ha basado principalmente en el Plan de Continuidad Judía. La idea es seguir haciendo lo que estaba planificado, y que en los últimos años nos ha permitido incorporar dos nuevos rabinos, llegar a las 1.000 familias socias, y desarrollar una gran cantidad de cursos y espacios de participación, para todos los segmentos etarios.

-¿Qué tipo de judíos debería formar el Plan de Continuidad?

-Nosotros queremos judíos que tengan un compromiso con las tradiciones, con Israel y con la transmisión de la continuidad. Esto implica educación, conocimiento y sentido de pertenencia. Estos tres elementos son los que estamos trabajando desde los niños más pequeños en adelante para formar judíos con identidad, capaces de enfrentar, por ejemplo, el antisemitismo presente en nuestra sociedad. No hay que olvidar que el antisemitismo es como un germen que está siempre presente y que va mutando, y hoy se expresa como antisionismo. Por eso es clave todas las comunidades apoyemos a Israel, informemos bien a nuestra gente, entendamos la temática del conflicto, y seamos muy activos para que ante eventuales escalamientos en el conflicto no nos pillen de sorpresa.

“Pero, adicionalmente, me gustaría destacar que como chilenos estamos insertos en la vida nacional, y por eso es muy importante mostremos de qué manera participamos y contribuimos al crecimiento y el desarrollo de Chile en los distintos ámbitos que nos tocan, tanto a nivel de individuos como a nivel institucional”.

-¿Cómo se va a enfocar el trabajo del directorio respecto de las necesidades y requerimientos de los socios?

-Antes que nada, somos una comunidad inclusiva y tratamos de satisfacer la mayor cantidad de necesidades de nuestros socios, de acuerdo a nuestros recursos y capacidades. Dicho esto, creo que debemos estar muy atentos a los tiempos que uno va viviendo, porque los requerimientos son dinámicos y van cambiando.

-¿Y cómo se orientará el enfoque hacia las personas que no son socias del Círculo?

-El Círculo siempre ha tenido las puertas abiertas a todos los miembros de la comunidad judía. Por eso, junto con el foco en nuestros socios, estamos abiertos a todas las personas que quieran participar, colaborar y sentirse parte. En ese sentido, podemos decir que la responsabilidad de continuidad judía no es solamente hacia los socios de nuestra institución sino hacia toda la comunidad judía.

-¿Cómo es tu mirada respecto de la cooperación con otras instituciones de la comunidad judía?

-Me parece que es un tema clave hoy en día, especialmente luego del ejemplo que hemos visto a través de la alianza que se ha establecido entre el Instituto Hebreo y el Estado Israelita. Tenemos una muy buena relación con todas las otras comunidades masortím y creo que pronto veremos un cambio importante para generar más integración y colaboración.

-Antiguamente se habla de fusiones, pero pareciera que hay otras fórmulas para lograr sinergias y potenciar la vida judía…

-Efectivamente, hay que ver de qué manera compatibilizar las sinergias que se producen en las distintas comunidades y a la vez mantener la identidad de cada una de ellas. Pero esta identidad no puede ser una excusa o un impedimento para un acercamiento de las instituciones, ya que esto debería ser un objetivo o un interés común de toda la comunidad judía de Chile.

-¿Finalmente, hay nuevos proyectos en carpeta?

-Efectivamente, pero sólo puedo anticipar una idea general. En primer lugar, como consecuencia de los acuerdos firmados con comunidades ortodoxas y con la NBI respecto del uso del cementerio, estamos afinando nuestro plan de desarrollo para esta área. Y, en segundo lugar, estamos trabajando para establecer un endowment para proyectar la continuidad y asegurar el funcionamiento de nuestra comunidad a futuro.

Andrés Fosk:
Acercamiento a otras comunidades
La consolidación del Plan de Continuidad Judía y la migración de Iamim Noraim al Mercaz, fueron dos de los logros destacados por el presidente saliente del Círculo Israelita, Andrés Fosk, en el contexto de la Asamblea General donde fue aprobada su Memoria.Tras la Asamblea, Fosk expresó que entrega la Presidencia con una sensación de satisfacción, pues hoy el CIS es una comunidad más grande y más sustentable económicamente que cuando comenzó el trabajo. “Además, con una gran tranquilidad, porque el equipo que seguirá a cargo tiene una excelente capacidad y el mismo cariño por la institución”.

-¿Cuáles fueron a tu juicio los principales logros del período?

-Creo que existen dos dimensiones en este tema, el primero dice relación con las actividades y la vida al interior del Círculo. En este ámbito creo que la consolidación del Plan de Continuidad Judía es el principal logro, ya que nos ha permitido darle vida a la institución. Además, no puedo dejar de mencionar en esto la migración de Iamim Noraim a nuestra casa, fue maravilloso ver a toda nuestra gente reunida en un lugar en un día tan importante.

-¿Y en el plano externo?

-En ese ámbito, para mí igual o más importante, el lograr mejorar el actual acuerdo con la NBI que norma nuestra convivencia y participación en el cementerio y la firma por primera vez de un acuerdo de trabajo conjunto con las comunidades ortodoxas en el mismo sentido, son grandes éxitos logrados. Me enorgullece mucho la firma de los convenios relacionados al cementerio firmados con las comunidades ortodoxas y con la NBI. El primero es un gran acuerdo que permitió asegurar que los judíos no nos dividamos aún después de muertos entre tendencias religiosas con la construcción de otro cementerio, el segundo fue el mejorar las condiciones de nuestra comunidad hermana de la NBI en todo lo relacionado a la sepultación de sus socios, fue nuestra iniciativa ya que consideramos que se requería un cambio.

-¿Cómo evalúas el impacto del Plan de Continuidad Judía en el Círculo?

-Como todas las grandes iniciativas, el PCJ ha debido ir adaptándose. Partimos con una gran afluencia de socios y los planes y cursos se fueron multiplicando más allá de nuestras iniciales capacidades. Ese explosivo crecimiento trajo consigo la necesidad de contratar más gente para administrar las actividades, lo que sin duda afecta en la calidad y homogeneidad, ya que se hace difícil controlar durante la expansión. En mi opinión el plan está hoy en un momento de madurez, donde deberemos ser capaces de consolidar actividades y segmentos de manera de asegurar mantener una gran calidad de servicio. Eso último es un tremendo desafío que va mucho más allá de las ganas, pues los socios quieren y merecen actividades de excelencia, quieren saber cada vez más y necesitaremos formalizar un sistema que permita cumplir sus expectativas.

-¿Sientes que la institución satisfizo los intereses y necesidades de los socios y de la comunidad en general?

-Quisiera pensar que sí, pero soy parte muy interesada como para juzgar. Si puedo asegurarte que el cariño y la dedicación estuvieron.

-¿Qué temas te hubiera gustado implementar y no se pudo en este período?

-Me hubiera gustado lograr mayores acercamientos con las restantes comunidades. Soy una persona que considera que el futuro será mejor si logramos acercaros y apoyarnos entre comunidades. Las divisiones en el mundo Masortí en Chile me parecen muy artificiales, extemporáneas. Hace varias décadas que rezamos en el mismo idioma y que estamos todos mezclados, ashkenazim de diferentes orígenes y sefaradim. Desde que asumí traté de abordar esta responsabilidad de juntarnos más, y en cada oportunidad que fue necesario procuré ayudar a conciliar. Espero que algo de eso se haya logrado.

-¿Cómo fue el trabajo con el directorio y staff de la institución?

-El Círculo tiene un gran equipo administrativo que sabe muy bien como llevar la institución. Para mí fue un verdadero placer tratar de ayudar, pero los verdaderos artífices de todo lo que ha logrado el CIS son quienes laboran ahí día a día, tanto en Culto como en el resto de la institución.

-¿Cómo vislumbras el futuro de la institución para los próximos dos años?

-Extraordinario, sin duda. Conozco muy bien al próximo presidente y sé que además de su gran cariño por el Círculo tiene una gran capacidad de trabajo. Eso junto al increíble equipo de Culto que tenemos es clave y garantía de éxito futuro.

Nuevo Directorio Círculo Israelita de Santiago
Jorge Ancelovici
Yoab Bitran
Roberto Busel
José Elimelech
Andrés Fosk
Raúl Goren
Sharon Gottlieb
Miguel Infeld
Jorge Mayerson
David Naschelski
Sergio Navon
Daniel Rappoport
Franklin Risnik
Verónica Waissbluth
Roman Yosif