Max Nordau: Ideólogo y creador de los congresos sionistas mundiales

Max Nordau, nacido como Simon Maximilian Südfeld, fue un crítico, escritor, publicista y médico, líder del movimiento sionista y cofundador de la Organización Sionista Mundial. Fue redactor editorial y corresponsal de varios otros periódicos. Sus escritos periodísticos fueron recopilados y proporcionó el material para sus libros que gozaron de gran reconocimiento. Nordau fue un ejemplo de un judío europeo completamente asimilado y aculturado. A pesar de ser criado en un ámbito religioso, Nordau era un agnóstico. En un relato autobiográfico dijo “Cuando cumplí los quince años, abandoné el estilo de vida judío y el estudio de la Torá…

El judaísmo siguió siendo un mero recuerdo y desde entonces siempre me he sentido como alemán y solo como alemán “. Nordau inicialmente habia defendido posturas de asimilación para la supervivencia del pueblo judío, sin embargo más adelante se desencantaría con este pensamiento y pasó a defender el sionismo. La conversión de Nordau al sionismo y la vuelta al sentimiento judío fue desencadenada por el caso Dreyfus . Muchos judíos, entre ellos Theodor Herzl , vieron en el caso Dreyfus evidencia de la universalidad del antisemitismo y la falla del intento de asimilación a la cultura europea. Fue, junto con Theodor Herzl, cofundador de la Organización Sionista Mundial, presidente y vicepresidente de varios congresos sionistas y pieza fundamental en el desarrollo del llamado «Plan Uganda».

Nordau pasó a desempeñar un papel importante en la Organización Sionista Mundial ; de hecho, la fama de Nordau ciertamente ayudó a llamar la atención sobre el movimiento sionista. Fue quien propuso realizar los Congresos Sionistas Mundiales lo que jugó un papel vital en la configuración de lo que se convertiría en sionismo como un movimiento democrático.

Aunque no es tan recordado con Herzl, su rol fue fundamental para la creación del movimiento sionista y la posibilidad de concretar el sueño de 2000 años de volver al suelo ancestral. Fue una figura de altísima relevancia para que medio siglo después se pudiera crear el Estado de Israel.