Líder ultraortodoxo insta a los fieles a rezar en soledad debido al coronavirus

Después de semanas de estancamiento, el líder rabínico de mayor rango en el mundo ultraortodoxo, el rabino Chaim Kanievsky, ordenó a los miembros de la comunidad que obedecieran las órdenes de distanciamiento social y realicen sus oraciones en soledad, evitando reunir la Minián, y permitiendo a los miembros de la comunidad denunciar a sus pares que violen la ley.

Las instrucciones de Kanievsky fueron notables por el nivel de confianza que impartieron a los funcionarios y expertos con respecto a la epidemia de coronavirus, en contraste con los comentarios anteriores que hizo el rabino, así como a la actitud predominante en la comunidad que a menudo confía más en los rabinos que los funcionarios de índole estatal y médico.

Hace dos semanas, a pesar de la creciente epidemia de coronavirus, Kanievsky y el otro líder principal del mundo ultraortodoxo, el rabino Gershon Edelstein, decidieron no cerrar las escuelas de niños ultraortodoxos y las yeshivas, alegando de que los niños que estudian Torá proporcionan protección física al pueblo judío.

Sin embargo, el domingo, después de que se publicaron datos que mostraban que las tasas de infección entre el público ultraortodoxo eran particularmente altas, Kanievsky finalmente emitió varias resoluciones que instruían a la comunidad a tomar la epidemia en serio.

En respuesta a una lista de seis preguntas que aparentemente le plantearon miembros del público en los últimos días, Kanievsky adoptó una postura firme sobre la importancia de adherirse a las instrucciones de distanciamiento social y obedecer las instrucciones de los médicos.

Cuando se le preguntó si una persona que afirma que confía en D-os que no se infectará con el coronavirus Covid-19 y, por lo tanto, viola las órdenes de distanciamiento social emitidas por el Ministerio de Salud, debe considerarse “como un rodeo”, dijo Kanievsky.

Un “rodeo” en la ley judía es alguien que está tratando de asesinar a otra persona, y contra quien se pueden tomar medidas extremas para detener sus acciones.

Kanievsky agregó que si una persona violaba las órdenes de distanciamiento social y, por lo tanto, infectaba a otra persona y causaba su muerte, esa persona sería responsable de la muerte de la persona que infectaba.

Kanievsky también dictaminó que las personas deben dejar un teléfono celular encendido sobre Shabat y responderlo en caso de que un médico esté tratando de contactarlo en una situación de emergencia.

Usar un teléfono en Shabat generalmente viola la ley judía a menos que haya una cuestión de vida o muerte, por lo que el fallo de Kanievsky demuestra la seriedad con la que ahora está tomando la epidemia de coronavirus.

Además, el rabino dictaminó que estaba permitido informar a las agencias de aplicación de la ley sobre un individuo, una sinagoga e instituciones educativas que violen las órdenes del Ministerio de Salud, incluso si eso significa multas o incluso se impondrá prisión a dichos infractores.

Kanievsky dijo en resumen que el público en general debería rezar para detener la epidemia.

Dado que Kanievsky y Edelstein decidieron mantener abiertas las escuelas de niños y las yeshivas, muchas de esas instituciones continuaron operando durante varios días de forma casi normal.

Los dos rabinos nunca rescindieron esa decisión, pero la semana pasada terminó el período de invierno y las escuelas ultraortodoxas y las yeshivas ahora están de vacaciones de Pascua, que dura un mes.

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