Dos emocionantes historias

“Nunca es tarde cuando la dicha es buena”
Los días Lunes, Jueves y Sábados son los días que los judíos leemos la Torá, es decir, el pergamino que contiene los 5 libros sagrados y esta escrito a mano, con tinta.
Todo varón judío al llegar a la edad de 13 años hace una ceremonia llamada Bar Mitzvá y a partir de ella ellos deben cumplir los 613 preceptos y tomar responsabilidades por sí solos. Aun no son considerados mayores de edad pero si reciben más derechos y más obligaciones que de niños.

En el Muro Occidental hay una ONG que suele organizar esa ceremonia voluntariamente a cualquier joven que llega y son pocos los varones judíos israelíes que no usan de sus servicios. Una ceremonia que culmina con un diploma firmado con el sello del lugar más sagrado para el judaísmo.

Muchos jóvenes llegan incluso desde el exterior especialmente para hacer ese acto en ese mismo lugar.

El Jueves pasado los voluntarios que estaban allí para recibir al próximo varón de 13 años se encontraron con una sorpresa y quisieron documentarla. Yo traduje para ustedes aquel video que se hizo viral en Israel y el mundo judío.

Otra historia no menos emocionante les relata Nira -mi esposa- sobre una pareja que quiso hacerle honor al dicho con el que abrí la descripción. Mazal Tov!