Netanyahu presiona a Azul y Blanco para permanecer en coalición

El primer ministro Benjamín Netanyahu envió una rama de olivo a Azul y Blanco en la facción del Likud del lunes, enfatizando la importancia de mantener el actual gobierno de unidad nacional antes de la votación del miércoles sobre la dispersión de la Knesset.

Sin mencionar el partido del primer ministro suplente Benny Gantz, Netanyahu dijo que el miércoles, la oposición “intentará arrastrar a Israel a elecciones innecesarias, pero el Likud votará en contra de la dispersión del Knesset ya favor de la unidad”.

Netanyahu dijo que el Likud respalda el mantenimiento del actual gobierno de unidad para combatir el coronavirus, ayudar a la economía y lograr más acuerdos de paz. “El pueblo de Israel se merece un gobierno que trabaje no para las elecciones ni para la política, sino para ellos”, dijo Netanyahu.

Azul y Blanco respondió que “el público ha terminado de comprar las mentiras de Netanyahu”. Además, el partido agrego: “Si no estuvieras en juicio, habría un presupuesto”.

Gantz decidirá el martes por la noche cómo votar sobre la dispersión de la Knesset. Si el proyecto de ley de dispersión de la Knesset del líder de la oposición Yair Lapid pasa su lectura preliminar el miércoles, aún tendría que aprobarse tres veces en el comité y tres veces más en el pleno para convertirse en ley.

Lapid expresó optimismo el lunes de que Azul y Blanco lo ayudarían a aprobarlo. En una reunión de su facción Yesh Atid-Telem, Lapid se acercó a sus antiguos aliados políticos en Azul y Blanco. “En 48 horas acabaremos con el peor gobierno de la historia del país”, aclaró Lapid.

Azul y Blanco anunció el lunes temprano que presentaría tres proyectos de ley a los que se opone el Likud: uno que promueve los derechos de los hombres homosexuales a adoptar niños en Israel, otro que agregaría garantías de igualdad a la Ley del Estado-Nación y un tercero que legislaría la declaración de Israel de la independencia.

Según la propuesta, los presupuestos estatales de 2020 y 2021 se presentarían juntos al gabinete para su aprobación la próxima semana y luego avanzarían por separado en la Knesset. El presupuesto de 2020 se convertiría en ley antes de la fecha límite del 23 de diciembre y el presupuesto de 2021 en febrero.

Por FB/RJ
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