El telegrama de Höfle

El 11 de enero de 1943 fue enviado el llamado ‘Telegrama Höfle’, un documento secreto nazi que la inteligencia británica logró interceptar. Lo singular del caso es que su mensaje fue descubierto y se hizo público en el año 2000. Se lo halló entre los archivos desclasificados de la Segunda Guerra Mundial de la Oficina de Registros Públicos, en Kew, Inglaterra.

El radiotelegrama, es un documento críptico de una página, que consta de varios cables, entre ellos, un mensaje ultra secreto enviado por el SS Hermann Höfle, a Adolf Eichmann, responsable del departamento de deportación y exterminio de los judíos en Berlín y a Franz Heim, comandante de la policía de seguridad en Cracovia. Höfle, era un oficial de las SS designado para el estado mayor de la Operación Reinhard en la región de Lublin.

La Operación Reinhard era el nombre en clave del plan secreto de los nazis para exterminar a los judíos polacos en el territorio del Gobierno General de la Polonia ocupada. La operación llevaba el nombre del general SS asesinado Reinhard Heydrich y era la fase de la Shoá que estuvo marcada por el inicio de los campos de exterminio en la Solución Final.
En el descifrado del telegrama se descubren las estadísticas sobre el número y el destino de las víctimas judías transportadas en 1942. El campo de Belzec aparece con la letra B, Sobibor con la S, Treblinka con la T, y Lublin-Maidanek con la L.

Los números de las víctimas fueron compilados y cifrados por Höfle a partir de registros muy precisos compartidos con la Deutsche Riechbahn. Los números arrojan una nueva luz sobre el sistema utilizado y el alcance de los crímenes cometidos por las SS. Además, el telegrama ofrece detalles acerca del arribo de los trenes en la quincena anterior al 31 de diciembre de 1942.

Todos los trenes utilizados durante la Shoá eran dirigidos por la Deutsche Reichsbahn. Las SS le pagaban a los ferrocarriles alemanes el equivalente a un boleto de tercera clase por cada prisionero transportado hacia los campos de exterminio. Según los manuales ferroviarios utilizados, la configuración de los trenes contaba con 50 vagones de carga, y cada vagón con 50 prisioneros. En realidad, el número prisioneros era mayor, los vagones de carga se llenaba con hasta 100 personas.

Según la decodificación del telegrama de Höfle la cifra de judíos que fueron llevados a los diferentes destinos de la muerte en ese período fueron: 1.274.166, número que también se corrobora con el Informe del Dr. Richard Korherr, un inspector en jefe de la Oficina de Estadísticas de la SS, quien en marzo de 1943 resumía en un informe a Heinrich Himmler los avances del exterminio judío a diciembre de 1942. Ambos documentos citan exactamente la misma cantidad de personas durante la Operación Reinhard.

El valor de este descubrimiento radica, en que los analistas de inteligencia británicos que descifraron el mensaje durante la guerra pasaron por alto su importancia. Esto sucedió porque el mensaje solo contenía letras de identificación para los campos de concentración, no nombres completos, y además costó descifrar los números que aparecían después de las letras. La única pista era la mención de la Operación Reinhard, y cuyo significado era la eliminación de los judíos polacos.

Hoy 11 de enero, evocar el documento de Höfle no solo contribuye a preservar la memoria de los trágicos sucesos vividos por el pueblo judío durante la Segunda Guerra Mundial, sino es una prueba más que fortalece la lucha que se libra contra los negacionistas o banalizadores de la Shoá. Y más aún, cuando aparecen políticos, quienes desde sus cargos oficiales, propagan y difunden diatribas antisemitas, caracterizando a los judíos de apátridas como lo hacía el nazismo. Tal como sucedió hace unos días en el que un diputado de nuestro país, con un lenguaje vil y sectario: hostigó, injurió, y diseminó el odio hacia los ciudadanos argentinos judíos.

*Yehuda Krell es profesor de Historia Judía graduado en el Instituto Superior de Ciencias Judaicas, Bs. As., y profesor en Educación Judía con especialización en Historia Judía para niveles Medio y Terciario del Ministerio de Educación de la Argentina. Realizó estudios de posgrado en Israel.

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