¿Porque los deportistas sienten menos dolor?

En los entrenamientos y competiciones, con regularidad empujan sus cuerpos más allá de los límites que la mayoría de nosotros puede soportar.

Pero si bien no hay duda de que los triatletas logran importantes desempeños, se sabe muy poco acerca de lo que les da a sus habilidades el carácter de excepcionales.

Ahora, investigadores de la Universidad de Tel Aviv han descubierto una posible explicación.

La profesora Ruth Defrin y su estudiante de doctorado Nirit Geva del Departamento de Terapia Física, parte de la escuela de Stanley Steyer, han encontrado que los triatletas sienten menos dolor que los deportistas ocasionales. Sus hallazgos fueron publicados en la revista Pain.

“En nuestro estudio, los triatletas mostraron menor dolor en intensidad, y tolerancia por más tiempo, que otros individuos del grupo de investigación”, dice Defrin.

“Creemos que tanto los factores fisiológicos y psicológicos subyacen a estas diferencias ayudan a explicar cómo los triatletas son capaces de rendir a un nivel tan alto”.

Diecinueve triatletas y 17 no deportistas participaron en el estudio de los investigadores TAU. Los triatletas son personas que entrenaron y compitieron en al menos dos triatlones por año, incluyendo en algunos casos el notoriamente difícil Ironman Triathlon, que consiste en un nado de 2.4 millas, un “paseo” en bicicleta de 112 millas, y una carrera de 26.2 millas del maratón.

Los no atletas se refieren a personas que hacían ejercicios no competitivos, como correr, nadar, o clases de aeróbic.

Todos los participantes fueron sometidos a una batería de pruebas psicofísicas sobre dolor, que implica la aplicación de un dispositivo de calentamiento de un brazo y la sumersión del otro brazo en un baño de agua fría. También llenaron cuestionarios sobre sus actitudes hacia el dolor.

En las pruebas, los triatletas identifican el dolor tan bien como los no atletas, pero ellos lo percibían como menos intenso y fueron capaces de soportarlo por más tiempo.

Los investigadores explican que la detección del dolor es una experiencia sensorial relativamente sencilla, mientras que la evaluación del dolor y estar dispuesto y ser capaz de soportarlo implica una actitud, motivación y experiencia de vida.

Los triatletas mostraron temer y preocuparse menos por el dolor, lo que puede ayudar a explicar su mayor tolerancia, dicen los investigadores.

Los triatletas también mostraron una mejor capacidad de inhibir el dolor que los no atletas.

Los investigadores dicen que la psicología puede ser un factor importante aquí también.

Los triatletas tienen menos miedo al dolor por lo que tienden a mostrar una mejor regulación del dolor.

Estudios previos han encontrado de manera similar que la manipulación psicológica puede afectar la percepción del dolor.

Otra explicación para explicar que los triatletas muestran signos más bajos de dolor, una mayor tolerancia al dolor, y una mejor regulación del dolor es que han enseñado a sus cuerpos a responder de forma menos acentuada a los estímulos del dolor a través de su intenso entrenamiento.

Los investigadores dicen que su estudio junto con la literatura existente sugiere que la psicología y la fisiología en conjunto permiten a los triatletas hacer lo que hacen.

“Es muy difícil mirar la fisiología y la psicología por separado”, dice Defrin. “Pero, en general, la experiencia es la suma de estos factores .”

Los investigadores planean realizar más investigaciones para determinar si los triatletas participan en su deporte porque sienten menos dolor o sienten menos dolor porque participan en este deporte. El huevo y la gallina versión triatlón.

Si resulta que el entrenamiento intenso, de hecho, ayuda a reducir y regular el dolor, esta investigación podría ser usada para tratar a personas con dolor crónico. Al igual que los triatletas, los pacientes con dolor crónico sufren a diario, pero su dolor está fuera de su control y tiene el efecto contrario, debilitan en lugar de fortalecer la inhibición del dolor.

Fuente: Latam Israel