“Los resultados de las elecciones italianas son muy peligrosos para Israel”

“Desafortunadamente, el partido del ex presidente Berlusconi, que es muy pro Israel, terminó con menos del 14% de los votos. El ala derecha terminó en segundo lugar con un 19 por ciento y es el segundo gran ganador.

Son derechistas y no son anti-Israel. Todo puede suceder con la formación de un nuevo gobierno. Pero si el partido “Five Star” lidera la coalición, podría ser un gobierno muy contrario a Israel “, dijo Nirenstein.

Los resultados son una victoria para los partidos anti Unión Europea y generalmente apuntan a un cambio euroescéptico en Italia.

Las proyecciones muestran que los dos partidos con las plataformas más euroescépticas, el “Five Star” y “La Liga”, juntos superarán el 50% necesario para gobernar Italia.

En proyecciones basadas en muestras de la votación del domingo, una coalición de centroderecha que incluyó “Forza Italia”, del ex primer ministro Silvio Berlusconi, la Liga antiinmigrante y un pequeño partido de extrema derecha, tuvo una ligera ventaja sobre el Movimiento “Five Star”.

El líder de este partido tiene como candidato a Primer Ministro a Luigi Di Maio, un joven de 31 años, quien nunca ha tenido este tipo de experiencias políticas.

El Movimiento se considera a sí mismo como “una democracia basada en Internet”, no un partido, y ve colectivamente a los partidos establecidos como un problema a erradicar.
Di Maio dirigió una delegación que viajó a Israel y visitó también a la Autoridad Palestina en 2016.

Según los informes, hizo y dijo todas las cosas “correctas” cuando la delegación se reunió con miembros del Knesset, visitó el museo del Holocausto Yad Vashem y un monumento a las víctimas del terror israelíes. También condenó “cualquier acción terrorista de Hamas” y declaró su apoyo a una solución de dos estados, al tiempo que pidió un diálogo renovado entre israelíes y palestinos.

Mientras recorría ciudades palestinas y campamentos de refugiados, Di Maio prometió que un gobierno de su movimiento reconocería oficialmente el Estado de Palestina, condenó el muro de separación y los asentamientos en Judea y Samaria, y denunció la negativa de Israel a otorgar a la delegación un permiso para visitar Gaza.
Lo que se llama, oportunismo político para quedar bien con todos.