Identifican al soldado israelí fallecido en el accidente del tanque

Su funeral se llevará a cabo a las 17:00 horas en el cementerio militar del Monte Hertzl.

Sus tres camaradas del equipo del tanque permanecen internados en el Hospital Soroka de Beer Sheva. Dos de ellos se encuentran en grave estado; mientras que el tercero sufrió heridas leves.

El accidente tuvo lugar cerca del paso fronterizo Nitzana que conecta Israel con la península de Sinaí, cuando la fuerza de un tanque del Batallón 74 de la Brigada 188, bajo la comandancia del Batallón Caracal, realizaba operaciones de rutina en la zona.

De acuerdo con una investigación preliminar, fuerzas del Ejército de Defensa de Israel (Tzáhal) fueron convocadas a la escena en horas de la madrugada para ayudar a frustrar un contrabando tras un intento previo que fue desbaratado.

Los contrabandistas estaban tratando de sabotear la infraestructura de seguridad y los tanques fueron convocados a la escena para impedir que utilicen los intentos de contrabando como una cobertura para un ataque terrorista.

Mientas las fuerzas estaban maniobrando, uno de los tanques, Merkava Mark III, que se desplazaba hacia uno de los puestos militares cayó tres metros en una pendiente del arroyo Nitzana, que se encuentra seco, incluso cuando, de acuerdo a las fuentes militares, el blindado se supone que está preparado para manejar esa inclinación.

Un incendio se desató en el tanque de combate, provocando que uno de los proyectiles se prendiera fuego, por razones aún desconocidas. El sistema de detección del fuego Spectronix del tanque extinguió el fuego, salvando las vidas de los tres soldados, que resultaron heridos en el incidente.

Drori estaba conduciendo el tanque, cuando murió. Sin embargo, aún no fue aclarado si falleció a raíz del fuego o como resultado de los materiales que extinguieron el incendio. Se sabe que no resultó herido cuando el tanque rodó cuesta abajo en la pendiente.

La Yeshiva (seminario rabínico) Shaalvim y la Asociación de Yeshivot Hesder emitieron un obituario para Drori: “Desde el día en que llegó a la yeshiva, trabajar sobre sí mismo era su objetivo principal. Cada día, le era importante avanzar y ascender. Había honestidad y profundidad en sus logros y en general. Eliyahu estaba lleno de alegría de vida y tenía un corazón de oro. Su testamento para todos nosotros es continuar avanzando cada vez más en el trabajo con uno mismo y en la construcción de la Torá (Biblia) para el pueblo y el país”.