La iglesia polaca condenó el acto antisemita en el que un muñeco judío fue quemado

“La Iglesia católica nunca tolerará las manifestaciones de desprecio hacia los miembros de cualquier nación, incluido el pueblo judío”, dijo el obispo Rafal Markowski, presidente del Comité para el Diálogo con el Judaísmo de la iglesia.

“En el contexto de los eventos que tuvieron lugar en Pruchnik el Viernes Santo, 19 de abril, la Iglesia expresa claramente su desaprobación por las prácticas que dañan a la dignidad humana”, agregó.

El viernes, los residentes de Pruchnik golpearon y quemaron una muñeca con un sombrero negro, tzitzit una nariz grande para representar a la figura bíblica de Judas, el discípulo que traicionó a Jesús. Aunque Jesús y sus discípulos eran todos judíos, algunos cristianos han asociado a Judas en particular con los judíos y lo usaron como una razón para apoyar el antisemitismo.

El ministro polaco del Interior, Joachim Brudzinski, también denunció el incidente, calificándolo de “idiota” y refiriéndose a los participantes como “satanes”.

En un video que se hizo viral se pudo ver a un hombre adulto instruyendo a varios niños a golpear a la efigie con palos, patadas y piedras como un “castigo” por el crimen de Judas, uno de los discípulos originales que traicionó a Jesús a los romanos, según la Biblia cristiana.

En un momento dado, después de que la efigie recibió 30 latigazos de un palo para simbolizar las 30 piezas de plata supuestamente pagadas a Judas, se escuchó a un adulto animando a los niños a continuar con la agresión.

Después de que la efigie fue cortada en pedazos y quemada, sus restos fueron arrojados desde un puente al cercano río Mleczka.