Tiroteo en una mezquita en Noruega: El hombre que disparó asesinó antes a su hermanastra

Detenido por «intento de ataque terrorista», el hombre, que militaba en la «extrema derecha», también es sospechoso de asesinato después de encontrar el cuerpo de un domicilio algunas horas después del tiroteo. La Policía, que presentaba al principio el cadáver como el de un familiar cercano, ha confirmado que se trataba de su hermanastra, hija de su madrastra.

El tiroteo del sábado se produjo después de varios ataques de supremacistas blancos a través del mundo. Entre los musulmanes, este episodio de apariencia islamófoba ha causado terror.

«El autor del ataque tenía ideas de extrema derecha», declaró un responsable de la policía de Oslo, Rune Skjold, sobre el sospechoso, un noruego de una veintena de años.

«Tenía posiciones xenófobas, quería sembrar el terror», añadió durante una rueda de prensa.

El hombre, cuya identidad no ha sido desvelada, abrió fuego el sábado por la tarde en el centro islámico Al-Noor, situado en una zona residencial de las afueras de Oslo, dejando un herido leve.

Algunas horas más tarde, la policía descubrió en casa del atacante el cadáver de una joven, identificada el domingo como hermanastra del sospechoso. Interrogado por la noche por los investigadores, el joven, se negó a explicarse.

Un mensaje que el sospechoso puso en un foro de internet poco antes de pasar a la acción evoca una «guerra de razas» y rinde homenaje al autor del ataque contra dos mezquitas que causó 51 muertos en marzo en Nueva Zelanda.

La autenticidad del mensaje y la identidad de su autor no pueden establecerse con certeza en este momento.

Este tiroteo tiene lugar en un contexto de aumento de los ataques llevados a cabo por supremacistas blancos, por ejemplo en Estados Unidos y Nueva Zelanda, donde 51 musulmanes murieron en marzo en dos mezquitas en Christchurch.

El autor de la matanza de Christchurch escribió manifiesto lleno de odio en el que explicaba estar influenciado por ideólogos de extrema derecha, entre ellos el asesino neonazi noruego Anders Breivik.

Breivik mató a 77 personas el 22 de julio de 2011, al hacer estallar una bomba en la sede del gobierno en Oslo y abriendo fuego luego en un encuentro de jóvenes laboristas en la isla de Utoya. Acusaba a sus víctimas de fomentar el multiculturalismo.