Los crímenes de odio contra los palestinos escalan en Cisjordania

Los palestinos en Yatma se amanecieron para encontrar a su aldea del norte de Cisjordania siendo blanco de vándalos en el segundo delito de odio aparente en el lapso en tres días.

La policía abrió una investigación sobre el incidente y se estaba preparando para ingresar a la aldea, aproximadamente a 8 kilómetros al sur del asentamiento de línea dura de Yitzhar.

Según los informes de los medios israelies, las fuerzas se alarmaron por el incendio provocado en una carpa policial cerca de Yitzhar en la noche del jueves. Antes de huir este mismo delincuente podría estar detrás del nuevo vandalismo.

Al igual que en el ataque del miércoles en el pueblo de al-Bireh, en Cisjordania, unos 30 automóviles tuvieron ventanas rotas o neumáticos rotos y los sospechosos grafitaron consignas hebreas que hacían referencia a un barrio de Yitzhar cuyos residentes han llevado a cabo ataques violentos contra las tropas israelíes.

“Zona militar cerrada” y “saludos desde la cima de la colina Yitzhar” se encontraron pintados con aerosol en vehículos, junto con estrellas de David, en fotos proporcionadas por el municipio de Yatma. Al comienzo de la semana, las FDI extendieron una orden que sellaba el puesto de avanzada de Kumi Ori de Yitzhar a los no residentes.

No se han realizado arrestos desde el incidente del miércoles en al-Bireh.

A pesar de las docenas de crímenes de odio contra los palestinos y sus propiedades durante el año pasado, los arrestos de los autores han sido extremadamente raros. Los grupos de derechos humanos lamentan que las condenas sean aún más inusuales, y la mayoría de los cargos en tales casos se retiran.

Horas antes del ataque contra Yatma, la Policía de Fronteras dijo que un joven conjunto israelí incendió una carpa perteneciente a las fuerzas de seguridad enviadas a Kumi Ori para hacer cumplir una orden de zona militar cerrada allí.

Ningún oficial resultó herido, y nadie estaba debajo del toldo cuando se incendió. El sospechoso logró huir de la escena.

“Las fuerzas de seguridad ven este acto como una escalada de violencia dirigida a los combatientes y tienen la intención de hacer todo lo posible para localizar al sospechoso”, dijo la policía de fronteras.

Varios medios israelies aseguran que el gobierno del primer ministro Benjamín Netanyahu ignoró las recomendaciones recibidas cinco veces durante el año pasado por las Fuerzas de Defensa de Israel para demoler una caravana perteneciente a algunos de los jóvenes colonos más extremos de Kumi Ori, que se encuentra a tres kilómetros al suroeste de Yitzhar

Un portavoz de la Oficina del Primer Ministro se negó a comentar sobre el informe.