Avigdor Lieberman y su polémico pasado

Avigdor Lieberman se ha convertido en el mayor crítico de los políticos ultraortodoxos israelíes desde que se negó el año pasado a unirse a la coalición del primer ministro Benjamin Netanyahu, alegando diferencias insuperables con los partidos Haredi.

Las campañas electorales posteriores de Lieberman han incluido críticas fuertes e implacables contra los ultraortodoxos y su amplio sector de políticos electos.

El desacuerdo se ha centrado principalmente en un proyecto de ley que regula el reclutamiento de hombres ultraortodoxos para el ejército: Lieberman exige que se obligue a más estudiantes del seminario a alistarse, denunciando a gran parte de la comunidad Haredi como “evasores”, mientras que los partidos ultraortodoxos exigen que se modifique la ley.

Sin embargo, una exposición publicada el lunes indica que mientras se desempeñaba como ministro de defensa entre 2016 y 2018, la oficina de Lieberman otorgó generosamente exenciones del servicio militar a muchos hombres ultraortodoxos, principalmente aquellos conectados con funcionarios gubernamentales.

Cientos de hombres jóvenes, incluidos hijos de políticos, rabinos y otras figuras prominentes, obtuvieron las exenciones después de que los legisladores ultraortodoxos se pusieran en contacto con la oficina de Lieberman.

La oficina de Lieberman negó las acusaciones, que se produjeron a un mes de las elecciones nacionales y podría afectar sus credenciales como héroe secularista que lucha por un reparto equitativo de la carga del servicio militar entre las diversas comunidades israelíes.

La comunidad ultraortodoxa ha disfrutado históricamente de aplazamientos generales del ejército en favor de continuar con los estudios religiosos, y muchos en la comunidad rechazan el servicio militar, que es obligatorio para otros israelíes judíos. Sin embargo, hay oposición al acuerdo por parte de muchos en la población en general que quieren que los ultraortodoxos ayuden en la pesada carga de defender el país.

El informe del lunes dijo que un jugador clave en la entrega de las exenciones fue el asociado y asesor cercano de Lieberman en asuntos relacionados con el ultraortodoxo, Avi Abuhatzeira.

“Los miembros de la Knesset [ultraortodoxos] o sus ayudantes se pondrían en contacto con Abuhatzeira mediante una llamada directa, un mensaje o un correo electrónico, y él se uniría de inmediato para ayudar”, dijo una fuente. “Fue una rutina, nadie lo ocultó”.

Otra fuente dijo que Abuhazeira “era exactamente como un miembro de los partidos ultraortodoxos”.

La oficina de Lieberman se ocupó de esos asuntos a diario como parte de su estrecha cooperación con los políticos ultraortodoxos, según el informe, y agregó que en total hubo cientos de tales casos.

Además de las solicitudes caso por caso, el informe también dijo que cientos de miembros de la Facción extremista de Jerusalén, que ha emprendido una campaña contra el alistamiento y ha organizado cientos de manifestaciones a menudo violentas sobre el asunto, recibieron exenciones radicales durante Lieberman tenencia. No explicó cómo funcionó este proceso o quién solicitó estas exenciones.

Las otras solicitudes, ocasionalmente incluso presentadas directamente a Lieberman, vinieron de todos los MK Haredi de los partidos Shas y United Torah Judaism (UTJ), y de las facciones jasídicas y lituanas que conforman UTJ.

Las fuentes dijeron que muchas de las exenciones no hubieran sido posibles sin la intervención de Lieberman, incluidas algunas entregadas utilizando documentos médicos falsos.

La oficina de Abuhatzeira y Lieberman se ocupó principalmente de esos asuntos a través del contacto con el subcomandante de la unidad militar Meitav a cargo de dar la bienvenida a los nuevos reclutas y clasificarlos en sus bases o ramas militares, según el informe. Se citó a fuentes que dijeron que esos contactos se mantuvieron violando las reglas y sin la debida aprobación.

La Unidad de Portavoces de las FDI dijo que investigaría el asunto y que si las reuniones se llevaran a cabo sin aprobación, “eso es un problema”.

Abuhazeira comentó que había recibido muchas solicitudes de exenciones de todas las comunidades israelíes y que las había tratado “en serio”.

La oficina de Lieberman dijo que el ex ministro de defensa “nunca intervino en ningún caso relacionado con exenciones de las fuerzas armadas, de ninguna forma”. Dijo que todas las solicitudes fueron manejadas profesionalmente y sin su participación personal.

El actual estancamiento político de Israel se remonta a disputas políticas sobre el alistamiento de estudiantes de yeshiva. En mayo, menos de dos meses después de que los votantes parecían darle a Netanyahu un mandato para formar un nuevo gobierno, las conversaciones de coalición colapsaron. El punto de conflicto era un proyecto de ley que obligaba a los hombres ultra ortodoxos a participar en el borrador militar obligatorio de Israel. Los partidos ultraortodoxos querían suavizar el texto de la ley, mientras que Avigdor Lieberman y su derechista secular Yisrael Beytenu insistieron en que no se uniría al gobierno a menos que la ley se aprobara en su forma actual. Israel se dirige a su tercera elección nacional en menos de un año el 2 de marzo.

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