La Jihad Islámica pidió un alto al fuego y tardó 20 minutos en romperlo

Los terroristas en la Franja de Gaza volvieron a disparar cohetes contra la ciudad israelí de Sderot y las comunidades aledañas el lunes por la noche, unos 20 minutos después de que, según los informes, un alto al fuego entrara en vigor.

No hubo informes inmediatos de lesiones o daños por el ataque. Los residentes del área informaron haber visto múltiples baterías antiaéreas del Iron Dome ser disparados al cielo.

En el transcurso del domingo y el lunes, se dispararon unos 90 cohetes desde la Franja de Gaza contra el sur de Israel, la mayoría de ellos por el grupo terrorista Jihad Islámico Palestino, y aproximadamente el 90 por ciento de las municiones que se dirigían hacia áreas pobladas fueron interceptados por el sistema de Cúpula de Hierro,  informaron las Fuerzas de Defensa de Israel.

En respuesta a los ataques, el ejército israelí lanzó múltiples rondas de ataques aéreos y con tanques en represalia contra las bases de la Jihad Islámica en la Franja de Gaza, uno de ellos habría sido contra un escuadrón que, según trascendió, se estaba preparando para lanzar cohetes, hiriendo a cuatro presuntos terroristas.

Justo antes de que comenzara el alto el fuego, los terroristas en la Franja dispararon varios cohetes contra la región de Eshkol, en el sur de Israel. Uno de ellos golpeó en el territorio de una comunidad en la región, sin causar heridas, pero provocando daños en un edificio cercano, el cual fue alcanzado por la metralla.

A la luz de los ataques en curso desde Gaza, el ejército ordenó que las escuelas permanecieran cerradas el martes en las comunidades de la periferia de Gaza, incluida la ciudad de Ashkelon, que alberga a unos 55.000 estudiantes.

En respuesta a los cohetes, Israel anunció el lunes por la noche que cerraría todos los cruces fronterizos entre Gaza e Israel, con la excepción de los casos humanitarios, hasta nuevo aviso. La zona de pesca de Gaza también estaría completamente cerrada.

El jefe de gabinete de las FDI, Aviv Kohavi, advirtió el lunes por la noche que la lucha podría no haber terminado todavía.

“No está claro si el incidente está en su apogeo o su final, si se intensificará o desaparecerá”, dijo Kohavi en un evento para reservistas militares en la ciudad central de Holon.

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