“En Argentina hay más de 100.000 personas que necesitan trasplantes”

En el Día Internacional de la donación de órganos, Radio JAI dialogó con Ezequiel Lo Cane, padre de Justina, paciente del Htal. Favaloro quien falleció a los 12 años esperando un trasplante de corazón y dio lugar a la Ley 27.447 de Trasplante de Órganos y Tejidos.

Ezequiel contó en carne propia lo que fue el sufrimiento padecido por su hija. “Al principio no sabíamos lo doloroso del proceso. Más allá del nivel económico, uno padece mucho las situaciones. Lamentablemente mi hija luchó muchísimo y no logró recibir el trasplante que le salve la vida”.

El padre de Justina es un profesional de la innovación y cuando vio que el proceso de donación de órganos era tan complejo, conformó un equipo de trabajo para pensar en soluciones, idear cómo agilizar los trámites que requería la ley de donación y trasplante de órganos que estaba vigente en ese momento. El grupo trabajó en conjunto con el Ministerio de Salud argentino, abogados y profesionales de la medicina.

En honor a esta iniciativa, la nueva ley se llamó “Justina”, la cual rige hoy en día en Argentina.

“Nosotros sabemos que en Argentina hay más de 100.000 personas que necesitan trasplantes. Estamos trabajando en un proyecto para acompañar a las personas e informarlos sobre los derechos que poseen debido a esta nueva ley”, comentó el padre.

El proyecto se denomina Casa Justina y se dedicará a proveer ayuda a los necesitados de órganos. El proyecto se llevará a cabo en varias provincias: Salta, San Juan, Córdoba, Buenos Aires, Tucumán y Ciudad de Buenos Aires (Ecuador 333).

La iniciativa se financia con voluntarios y entidades del sector privado.

El entrevistado explicó que uno de los puntos fundamentales de la nueva reglamentación es que ahora las personas que no quieran ser donantes deben registrarse. Anteriormente era al revés. Es decir que esta nueva ley admite por “default” a todos los adultos argentinos como donantes de órganos.

Además, antes 7 de cada 10 personas en las provincias decían que no querían ser donantes. Hoy bajó a unas 3 personas en promedio. Esto fue gracias al estado público que mejoro la capacitación de los profesionales e informó más a todas las personas sobre la importancia de la donación.

“En Agosto de 2018 se vieron los frutos de nuestros esfuerzos, fue el mes récord de donación de trasplantes en el país. La tasa incrementó en un 60%, se acerca mucho a la de países más avanzados”, destacó Ezequiel orgullosamente.

¿Cómo funciona el procedimiento? ¿Cambia según la causa de fallecimiento?

El entrevistado detalló: “En todos los casos se presenta el INCUCAI, le avisa a los familiares que el fallecido es donante y se realiza un proceso muy corto. El cuerpo es entregado de nuevo a los familiares en muy buenas condiciones”.

La Ley Justina permite que la persona misma decida. Cada uno puede elegir si al fallecer donará sus órganos o no, más allá de si en el momento posterior a la defunción, los familiares se opusieran.

Lo Cane especificó que los requisitos para que un órgano sea transportable, están relacionados con cuestiones médicas. No está relacionado con la edad del fallecido, sino con el estado de salud del mismo. Adicionalmente, la compatibilidad es un factor determinante.

De cada persona, se pueden donar aproximadamente 10 órganos. Sin embargo, en promedio se terminan donando solo 3. Esto sucede debido a compatibilidad y estado de salud de los mismos.

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