Los enemigos de Israel no están esperando a que se elija un primer ministro

Dicen que la tercera es la vencida.

Mientras Israel se prepara para ir a las urnas el lunes, una vez más, la misma agenda de problemas se encuentra sobre la mesa y las mismas grandilocuentes promesas se repiten al agotado civil israelí.

Los israelíes han votado durante años en base a su postura acerca de las cuestiones relacionadas con la seguridad, y no por nada. El estado judío vive rodeado por una miríada de amenazas que, de no ser tratadas correctamente, podrían poner en riesgo su existencia. Pero el desastre político en Israel, exacerbado por la creciente división entre la derecha y la izquierda, ha dejado un Israel abierto y vulnerable a las amenazas cada vez mayores que representan sus enemigos.

Si bien las promesas interminables de un Israel fuerte por parte del Primer Ministro “Mr.Security” Benjamin Netanyahu o por el ex Jefe de Gabinete de las FDI Benny Gantz, han caído en oídos de un país apático, el hecho es que el desmadre político ha comenzado a poner en riesgo al poder militar de Israel.

Los militares lanzaron el plan multianual Momentum en febrero, un plan diseñado para aumentar la letalidad de las FDI en precisión y alcance. El plan, que incluye la compra de nuevas plataformas y armas, se centra en la preparación de las FDI ante las potenciales amenazas que podrían enfrentar durante los próximos 30 años en el futuro.

El ejército de Israel dice que si bien existe una brecha entre las FDI y sus enemigos, se está cerrando rápidamente e Israel necesita aprovechar la oportunidad estratégica de mantenerse un paso por delante del enemigo haciendo los cambios necesarios en el ejército.

Pero, y es un gran pero, el presupuesto para el plan plurianual aún no se ha acordado con el Ministerio de Finanzas porque la Knesset no ha aprobado un presupuesto para 2020 debido a que se encuentra disuelta, como consecuencia de la falta de gobierno.

En noviembre, el establecimiento de defensa solicitó un suplemento presupuestario de 4 mil millones de shekels (1.15 mil millones de dolares) y, a mediados de diciembre, Kochavi se reunió con el ministro de Finanzas Moshe Kahlon y el ministro de Defensa Naftali Bennett y les dijo que las FDI necesitan un suplemento presupuestario de cientos de millones de shekels.

Con frentes más activos y explosivos en las fronteras de Israel, con arsenales enemigos convirtiendo a grupos como Hezbolláh en ejércitos terroristas, los militares han advertido que si no se encuentran los fondos pronto y no se elabora un presupuesto, habrá un riesgo para la seguridad nacional de Israel.

Pero, al igual que las Fuerzas de Defensa israelíes necesitan cientos de millones de fondos adicionales, los demás necesitan los fondos de la misma manera.

Entonces, cuando Israel vota una vez más, el cansado y creciente apático necesita comprender algo: Incluso si finalmente se elige un Primer Ministro y el país puede evitar una cuarta elección, el estado de las cosas es frágil.

Como advirtió Kochavi, “las amenazas no nos están esperando”.

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