El Semanario Hebreo del Uruguay necesita ayuda

Amigos todos, les escribo en un momento muy difícil. Tenía planeado celebrar a fin de este año el 60° aniversario de Semanario Hebreo impreso, pero en la situación actual, no sé cuánto puede subsistir. Así, es imposible seguir. Si no hay un cambio que traduzca los numerosos elogios por el trabajo hecho, en apoyo concreto a esta misión, tendré que cerrar.

Semanario Hebreo, perdonen si suena a falta de modestia, es uno de los fenómenos más increíbles del periodismo judío mundial- sí, mundial-a pulmón, con ideales y fuerza, que logró hasta ahora seguir adelante mucho más que cualquier otro semanario uruguayo. La obra iniciada por papá, José Jerozolimski (z”l), de bendita memoria, que yo seguí lo mejor que pude desde que él falleció hace casi 16 años, fue siempre, y sigue siendo, un baluarte de la defensa de Israel, de su derecho a vivir en paz y seguridad, de las relaciones de amistad entre Uruguay e Israel, abordando siempre con entusiasmo tanto temas nacionales como una diversidad de temas de la realidad comunitaria judeo-uruguaya y el mundo judío todo , siempre con entrevistas especiales y, creo yo, un alto nivel periodístico. Y con corazón.

Pero por más corazón que se ponga en esto, si no hay respaldo económico, espacios pagos que permitan sustentarlo, es imposible seguir adelante. La crisis no es nueva. El Coronavirus no ha hecho más que agravarla.

Todos sabemos que hoy en día se vive en gran medida en el mundo digital. Semanario Hebro está también allí, con el portal SemanarioHebreoJai. Pero no todos se manejan constantemente en las redes y pantallas. Sigue habiendo un público que precisa y quiere el papel entre sus manos. Claro que hoy en día es menor que en el pasado. Pero son los padres y abuelos de muchos de los que estarán leyendo estas líneas.

Quien quiere información digital, la busca. El Semanario Hebreo impreso llega a la casa de los suscriptores. También a los abuelos del Hogar Israelita. Y llega gratuitamente desde hace décadas, todas las semanas, a Ministros, Senadores, Diputados, periodistas, sacerdotes, formadores de opinión, como obra de esclarecimiento.

Pero algo clave de entender en la situación actual, es que poniendo publicidad en el impreso y/o el portal digital, están logrando tanto apoyar al impreso como a una plataforma en la que hay aproximadamente 10.000 impresiones por día. Hoy, en medio de la crisis, puede parecer irrelevante. Pero el Coronavirus terminará y se volverá gradualmente a la normalidad. Y la pregunta es si en ese momento, seguiremos existiendo.

Amigos, esto es un llamado. Si hay quienes consideran que esto debe seguir adelante, que vale la pena hacerse presentes para hacerlo posible, me pueden escribir por privado.

No pierdo proporciones. Tengo clarísimo que es peor morir de Covid-19. Pero para eso, yo no puedo ni encontrar la vacuna ni desarrollar remedios. Por el Semanario Hebreo, aún puedo tratar de luchar.
Pero sola, es imposible.

El 30 de abril, dedicaremos nuestro número a Iom Haatzmaut. Por la crisis, no enviamos cartas a avisadores de siempre exhortando a publicar. El material, como siempre, será de interés y nivel. La pregunta es si también irá acompañado de páginas llenas de avisos y adhesiones, para hacer posible que Semanario Hebreo siga trabajando. Depende de quienes puedan y quieran publicar.

Si leen esto amigos del Semanario Hebreo que consideran que es importante que siga, empresas o individuos que quieran estar presentes en forma permanente o asidua en nuestras páginas y/o en el portal SemanarioHebreo Jai, no necesariamente porque precisen la publicidad sino porque saben que con ello estarán apoyando una causa, bienvenidos serán.

Todos sabrán cómo ubicarme. Quienes me deseen contactar, no tendrán problema en hacerlo.