Colombia y sus comunidades judías luchan contra el COVID-19

Colombia se encuentra superando los 2000 contagios diarios de los cuales más de 50 fallecen. El número de casos del virus ha escalado a la par con las cifras de aprobación del usualmente desprestigiado mandatario, lo que disipó la protesta social y las acusaciones de corrupción electoral que amenazaban con dificultar su gobernabilidad.

La pandemia de coronavirus, que golpeó fuertemente la popularidad de líderes en varios países, le dio un inesperado impulso al presidente de Colombia, Iván Duque.

Desde el principio de la pandemia, la capital, Bogotá, ha sido el mayor foco de contagio. Hasta ahora representa mas del 30 % del total de infecciones en el país suramericano.

Radio Jai dialogó con Vivianne Tesone Milhem, miembro de la Confederación de Comunidades Judías de Colombia y de la Agrupación de Damas Sefaradí, sobre la situación general que se vive en Colombia y cómo esta crisis afecta a las instituciones judías del país.

Al igual que en el resto de Latinoamérica, la mayoría de los casos confirmados se encuentran en las grandes ciudades, como su capital Bogotá y Medellín. En total hay más de 53 mil contagiados a nivel nacional y superan las 1700 muertes.

Durante las últimas semanas, las autoridades nacionales habían flexibilizado algunas medidas en pos de reactivar el comercio. Vivianne Tesone Milhem alertó: ¨En la capital, la ocupación de camas superó el 50% y ésta es una alerta que podría llevar al Gobierno a dar marcha atrás con la flexibilización del aislamiento para que el sistema de salud logre dar abasto¨.

Tesone Milhem fue consultada sobre las actividades de la Comunidad Judía. “Las Sinagogas permanecen cerradas desde que comenzó la cuarentena en marzo, pero la ausencia de espacio físico no impidió a la comunidad mantenerse activa y conectada online”.

La referente de la Agrupación de Damas Sefaradí dividió en dos etapas las tareas propias de las instituciones judías. ¨La primer etapa tiene como objetivo la asistencia a la comunidad, manejo de crisis, prevenir contagios y preservar la salud mental¨, señaló.

“Ahora estamos entrando en una segunda etapa donde el principal problema es la economía. Las personas que no estaban acostumbradas a precisar ayuda financiera y hoy su calidad de vida ha disminuido. Hay que ayudar a esas personas para que puedan reactivar sus negocios¨, concluyó Tesone Milhem sobre la situación.

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