Boris Johnson: “No anexen, negocien”

El primer ministro británico, Boris Johnson, hizo un llamamiento al gobierno israelí para que no anexe partes de Judea y Samaria, y en cambio, regrese a la mesa de negociaciones.

“Hay otra manera”, instó Johnson, presionando por la renovación de las conversaciones de paz entre palestinos e israelíes.

“Si bien entiendo la frustración que sienten ambas partes, es nuestro deber aprovechar la energía de este momento para volver a la mesa de negociaciones y luchar por una solución. Esto exigirá compromisos de ambas partes”, dijo Johnson.

“No estoy subestimando los desafíos que se interponen en el camino para lograr una paz duradera. Pero sigo creyendo que la única forma de lograr una seguridad verdadera y duradera para Israel, la patria del pueblo judío, es a través de una solución que permita la justicia y seguridad para israelíes y palestinos. Me niego a creer que esto sea imposible”, aseguró.

“Estoy orgulloso de la contribución de Gran Bretaña al establecimiento de Israel con la Declaración Balfour en 1917. Pero permanecerá sin terminar hasta que se encuentre una solución que brinde justicia y paz duraderas tanto para israelíes como para palestinos”, advirtió Johnson. “La única forma de lograr esto es que ambas partes regresen a la mesa de negociaciones. Este debe ser nuestro objetivo. La anexión solo nos distanciará de ella”.

El primer ministro británico enfatizó que Gran Bretaña es uno de los pocos estados miembros de las Naciones Unidas que apoya y defiende a Israel “de críticas injustificadas y totalmente desproporcionadas”.

“Soy un ferviente defensor de Israel.

Hay pocos objetivos que estén más cerca de mi corazón que garantizar que sus ciudadanos estén protegidos de la amenaza del terror y la incitación antisemita. Gran Bretaña siempre ha respaldado a Israel y tiene derecho a existir en paz y seguridad “Como cualquier otra nación”, aseguró el primer ministro.

“Seguí con gran tristeza las propuestas para anexar territorio palestino. Como amigo, admirador y partidario de Israel durante muchos años, temo que estas propuestas no logren su objetivo de asegurar las fronteras de Israel”.

El primer ministro advirtió que los planes de anexar partes de Judea y Samaria violarían el derecho internacional y amenazarían los esfuerzos de paz y seguridad de Israel. Además agregó que Gran Bretaña no reconocerá los cambios a las líneas de 1967, a menos que sean pactados tanto por los palestinos como por los israelíes.

Johnson advirtió que la anexión pondría en riesgo la mejora de las relaciones entre Israel y el mundo árabe y musulmán. “Los enemigos de Israel se aprovecharán de esta situación y la usarán contra cualquiera que anhele el progreso en el Medio Oriente”.

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