“Es absurdo permitir protestas mientras se prohíbe el funcionamiento de los comercios”

Miki Zohar, miembro del Likud, sostuvo que las protestas deben ser prohibidas bajo el concepto de que el gobierno debe decidir entre un cierre y una apertura total y aplicar los mismos parámetros tanto para la economía como para lo que llamó “demostraciones de odio”.

El aliado clave del primer ministro Netanyahu, criticó fuertemente las protestas contra el gobierno llevadas a cabo en simultaneo en Tel Aviv y Jerusalem en las que participaron miles de personas.

Opinión contaría a la expresada el día viernes por el ministro de justicia, Avi Nssenkorn quien declaró que no habría limites para las protestas aún si se instaurara un completo aislamiento agregando que “Incluso bajo limitaciones, aseguraremos los derechos civiles” y que “Los fundamentos de la democracia son importantes durante los tiempos habituales, e incluso más importantes durante las emergencias”.

En ambas ciudades las protestas, comenzaron en las áreas designadas por las autoridades, pero después terminaron por diseminarse por otros sectores, cortando calles y ocasionalmente enfrentándose con la policía. 15 fueron arrestados en Jerusalem y 13 en Tel Aviv. Además, las medidas sanitarias se vieron vulneradas en ambas demostraciones dado a que, aunque la gran mayoría de los manifestantes llevaban barbijo, el distanciamiento social fue prácticamente inexistente.

Entre los manifestantes no solo se encontraban miembros de la izquierda u opositores de Netanyahu sino también una gran cantidad de individuos que lo votaron, pero luego se vieron afectados por la crisis producto de las regulaciones tomadas para detener la pandemia. Medidas que tuvieron como consecuencia un 21% de desempleo (850 mil personas), pero que de igual modo no están teniendo éxito en el control de virus, llegando la última semana a hasta 1900 nuevos contagios diarios.

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