“En Colombia la pandemia ha sido tomada con muchísima rigidez”

Mientras en Israel han suspendido las clases presenciales a causa de los contagios de Covid, Latinoamerica se encuentra dirimiendo cómo continuará con la educación, hasta tanto se encuentre la cura a la enfermedad. Lisa Cohen es Presidenta de la Junta Directiva del colegio Colombo Hebreo, de Colombia y quisimos conocer cómo vive el país cafetero la pandemia y su actualidad educativa.

La dirigente explicó que “en Colombia, a nivel gubernamental y en especial en el distrito de Bogotá, la capital del país, la pandemia ha sido tomada con muchísima rigidez. Tuvimos que estar completamente cerrados hasta hace menos de un mes, por ende, muchos colegios, -me atrevo a decir que el 90por ciento, aún no ha reiniciado las clases”.

Colombia empezó una apertura económica hace menos de tres semanas, y ahora se está intentando el retorno a las aulas, en las que se están tratando de implementar las medidas exigidas por los niveles gubernamentales y los del Distrito Capital, Bogotá. Lisa considera que los protocolos no son muy fáciles de cumplir, los padres no tienen mucha tranquilidad. “Para muchas familias no es claro que sea seguro un retorno a clases en este momento, pero estamos tratando de que los niños regresen con los protocolos, que son bastante puntuales: No se permiten más de cuatro horas de niños en un aula, en un colegio, el aforo del colegio tiene que ser de un máximo del 35 por ciento, tapabocas todo el tiempo y lavado de manos”.

La Educación en Colombia tiene dos sectores: Uno es el de la educación pública y otro es la educación privada. Esta última, claramente, tiene acceso a buenos sistemas de conectividad y computadoras o tablets; entonces desafortunadamente, la brecha social y la realidad es muy distinta para esas dos en capas de la población.

A nivel del año escolar, en Colombia, la mayoría de los  colegios privados tiene el calendario americano; por ende, ahora estamos empezando el año escolar, con una mayoría del 90 por ciento de los colegios, porque los kínder, para niños de 1 a 4 años, tuvieron una deserción bastante alta, ya que el 80 por ciento de los jardines infantiles privados en Bogotá cerraron porque no era un buen negocio. En cuanto a los colegios, tuvieron un alto porcentaje de alumnos participando de las clases virtuales y se obtuvieron realmente altos niveles de participación, de conocimiento y aprendizaje.

Respecto de la experiencia judaica, dijo Lisa Cohen: “El colegio Colombo Hebreo es el único judío en Bogotá y su  rectora estaba justamente en Buenos Aires el día que en Bogotá cerraban el aeropuerto, en marzo. Iba a llegar para tomar las riendas del establecimiento pero nunca pudo hacerlo, y la doctora Askenazi pudo llevar muy bien este proceso, con un tzevet, un departamento judaico, muy robusto. Ha logrado transmitir por medio de una pantalla todos los valores de estas tradiciones y esos momentos tan importantes, en estos meses de Altas Fiestas”.

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