Cadena perpetua para el tirador de la sinagoga de Halle

Un tribunal alemán dictó el lunes una sentencia de cadena perpetua al terrorista detrás de un mortal ataque de extrema derecha el año pasado que casi se convirtió en la peor atrocidad antisemita del país desde la Segunda Guerra Mundial.

Los jueces del tribunal de Magdeburgo lo declararon “gravemente culpable”, lo que significa que se le prohibirá efectivamente su libertad anticipada después de 15 años.

La jueza presidente Ursula Mertens lo describió como un “ataque cobarde” cuando anunció el veredicto. Balliet no reaccionó, pero tomó notas.

Una puerta con cerrojo en la sinagoga en la ciudad oriental de Halle con 52 fieles adentro marcando Yom Kipur, el día más sagrado del año judío, fue lo único que impidió que el asaltante fuertemente armado llevara a cabo un baño de sangre planeado.

Después de no asaltar el templo el 9 de octubre de 2019, el atacante, Stephan Balliet, de 28 años, mató a tiros a una transeúnte y a un hombre en una tienda de kebab.

Fue acusado de dos cargos de asesinato y múltiples cargos de intento de asesinato en un caso que sacudió profundamente al país y alimentó los temores sobre el creciente extremismo de derecha y la violencia antijudía, 75 años después del final de la era nazi.

Durante su juicio de cinco meses, Balliet negó el Holocausto en audiencia pública, un crimen en Alemania, y no expresó ningún remordimiento a los objetivos, muchos de los cuales son co-demandantes en el caso.

“El ataque a la sinagoga en Halle fue uno de los actos antisemitas más repulsivos desde la Segunda Guerra Mundial”, dijo el fiscal Kai Lohse al tribunal.

‘Ellos son mis enemigos’
Lohse dijo que Balliet había actuado sobre la base de una “ideología racista, xenófoba y antisemita” para llevar a cabo un ataque no solo contra los que mató, sino también contra la “vida judía en Alemania en su conjunto”.

Los eventos que se desarrollaron fueron como una “pesadilla”, agregó.

“Al final de esta pesadilla, el perpetrador asesinó a dos personas e hirió y traumatizó a muchas otras”.

Durante el juicio, Balliet insistió en que “atacar la sinagoga no fue un error; son mis enemigos”.

Vestido con atuendo militar, filmó el ataque y lo transmitió en Internet, precediéndolo con un manifiesto que defiende su ideología misógina y neofascista.

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