Justificación iraní detrás del ataque terrorista de Nueva Delhi
La explosión no causó heridos, ningún daño al edificio y solo daños a los parabrisas de varios autos estacionados en las cercanías.
La explosión causada el 29 de enero de 2021 por un “dispositivo improvisado de muy baja intensidad” fuera del edificio de la embajada de Israel en Nueva Delhi es considerada por las autoridades israelíes e indias como un ataque terrorista, probablemente por parte de Irán.
La explosión no causó heridos, ningún daño al edificio y solo daños a los parabrisas de varios autos estacionados en las cercanías.
Una nota manuscrita, en inglés, encontrada en el lugar de la explosión, una pista clave para la investigación, está dirigida al embajador de Israel, Ron Malka, y advierte a Israel de la venganza por el asesinato el año pasado del comandante de la Fuerza Quds de Irán, Qassem Soleimani, y del científico nuclear iraní Mohsen Fakhrizadeh. Fuentes de la Policía de Delhi revelaron que en la carta, la explosión ha sido referida como un ‘tráiler’: “Podemos acabar con su vida, en cualquier momento y en cualquier lugar, mártir iraní …”, dice la carta.
Según esta carta, publicada por las noticias del Canal 13 de Israel, aunque los atacantes quieren destruir a Malka, “no quieren que fluya la sangre de personas inocentes a su alrededor”. La carta declara que todos los “participantes y socios” de la “ideología terrorista israelí dejarán de existir” y advirtió: “ahora prepárense para una gran y mejor venganza para nuestros héroes”.
Las imágenes de CCTV del lugar de la explosión revelaron que un taxi había dejado a dos personas cerca de la embajada, y aún no se ha determinado si estas personas tienen algún papel en la explosión. La policía se ha puesto en contacto con el conductor del taxi, le ha preguntado acerca de las dos personas y está haciendo dibujos de ambos sujetos, basándose en la información obtenida del conductor.
La policía de Delhi ha pedido detalles a través de la Oficina de Registro Regional de Extranjeros (FRRO) sobre todos los iraníes, incluidos los radicados en el extranjero, que hayan llegado a la capital durante el último mes. Hasta el momento, se están recopilando detalles de quienes se hospedaron en hoteles. La investigación se centra también en
estudiantes indios que estudiaron en Irán y ahora se sospecha que operan en India bajo órdenes iraníes.
Otra pista clave que los investigadores están investigando se relaciona con Jaish-ul-Hind, un grupo desconocido que se atribuyó la responsabilidad de la explosión en Telegram, más de una hora antes de que ocurriera. Los informes de televisión dijeron que las agencias centrales de investigación han recuperado un chat en las redes sociales en el que se puede ver al equipo terrorista orgulloso del ataque.
¿Qué podemos aprender de este primitivo y fallido ataque terrorista?
Al considerar este incidente como una operación iraní, el modus operandi sugiere que el objetivo principal era político / psicológico: inspirar un temor permanente de ataques de venganza más serios contra objetivos israelíes y judíos en todo el mundo.
La operación probablemente fue organizada por un grupo local prescindible de simpatizantes con un conocimiento mínimo de sus objetivos reales.
De lo contrario, es difícil entender por qué dos personas que utilizaron un taxi público se vieron envueltas en una operación simple, en la que el conductor pudo identificarlas fácilmente y entregar su identikit a la policía.
Esto también permite la negación en caso de que los perpetradores locales sean capturados.
El momento elegido, desde el punto de vista iraní, al comienzo del sensible proceso de negociaciones sobre el acuerdo nuclear con la administración Biden, no permite políticamente un gran ataque terrorista con consecuencias explosivas.
¿Por qué India?
El eco de un evento terrorista de este tipo, en una de las potencias mundiales en ascenso, tiene claramente el potencial de repercutir internacionalmente.
Además, la India alberga a unos 195 millones de musulmanes, incluida una gran minoría chií de posiblemente 40-50 millones, la segunda población chií más grande después de Irán.
El momento posiblemente esté relacionado con el aniversario de las relaciones diplomáticas entre la India e Israel que se iniciaron hace 29 años. El Hindustan Times ha
subrayado en este contexto que los dos países comparten vínculos muy estrechos y tienen acuerdos en varios campos, incluida la defensa, la ciencia, la tecnología, etc., prácticamente una alianza estratégica.
Según la experiencia pasada, es posible que los líderes iraníes piensen que pueden confiar en una investigación laxa por parte de las autoridades indias.
El exitoso ataque de febrero de 2012
De hecho, el 13 de febrero de 2012, un vehículo diplomático israelí fue bombardeado en Delhi, hiriendo gravemente a la esposa del agregado de defensa israelí y a otras tres personas, cuando un motociclista colocó un artefacto explosivo magnético en su auto y se alejó a toda velocidad.
Este escritor estaba en Nueva Delhi el día del ataque como participante en la principal conferencia india sobre temas de defensa y se le pidió que comentara sobre el evento en una estación de televisión local.
El programa presentó el ataque como una operación iraní, basada en información sobre ataques anteriores en Azerbaiyán y Bangkok en enero y uno frustrado en Georgia, el mismo día del ataque de Nueva Delhi, con el mismo modus operandi: un artefacto explosivo magnético conectado a un coche diplomático israelí.
Dos expertos indios, un ex diplomático de alto rango y un profesor de renombre, entrevistados en el mismo programa, rechazaron categóricamente esta evaluación y no aceptaron la idea de que un estado amigo y un aliado estratégico como Irán decidiera dañar la soberanía india con semejante descarado ataque en su suelo.
Tres semanas después, el 6 de marzo, la policía de Nueva Delhi arrestó al periodista indio Syed Mohammed Ahmad Kazmi por presuntamente facilitar el atentado con bomba contra el coche de la embajada israelí el 13 de febrero. Kazmi, un chiíta, fue empleado de la agencia de noticias iraní IRNA y de la radio iraní, además de ser columnista habitual de algunos periódicos urdu de gran difusión en la India.
La policía india ha identificado a tres iraníes implicados en el atentado de Nueva Delhi como Houshan Afshari Irani, Seyed Ali Mahdiansadr y Mohammadreza Abolghasemi. La policía dijo que Kazmi recibió U$D 5.500 y brindó asistencia a Irani.
Un tribunal indio emitió órdenes de arresto contra los tres iraníes en relación con el ataque. Irani, que había visitado Delhi dos veces y se fue a Malasia poco después del
ataque de Delhi, estaba en contacto con Masoud Sedaghatzadeh, uno de los sospechosos iraníes en el complot de bomba de enero en Bangkok.
La policía de Delhi concluyó que el ataque fue obra del IRGC. Kazmi había estado en contacto con sus miembros durante casi 10 años. El comisionado de policía de Delhi en ese momento, BK Gupta, había revelado que Kazmi también había confesado haber ayudado a Irán a realizar una investigación sobre la embajada israelí.
Los representantes de la sociedad civil se reunieron bajo la protección de ANHAD (Act Now Harmony And Democracy : Actúe ahora por la armonía y la democracia) para condenar el arresto de Kazmi. Shabnam Hashmi de ANHAD alegó que el periodista independiente también estaba siendo atacado por ser musulmán.
Alegando que el arresto se realizó bajo presión de Israel y Estados Unidos para nombrar e implicar a Irán en el caso, Manisha Sethi, presidente de la Asociación de Solidaridad de Maestros de Jamia, dijo que se estaban plantando historias extrañas en los medios de comunicación y exigió la liberación inmediata de Kazmi bajo fianza. Más de 100 personas se reunieron en Nueva Delhi en una manifestación de protesta y exigieron que la policía liberara a Kazmi.
Kazmi finalmente obtuvo la libertad bajo fianza por parte de la Corte Suprema de la India en octubre de 2012, pero se le impidió viajar al extranjero. Al día de hoy, continúa presentando un programa en su canal de YouTube, Media Star World, donde habla sobre Asia Occidental y los problemas de la región.
India ha buscado información oficial sobre Irani, Mahdiansadr, Abolghasemi y Sedaghatzadeh. Interpol ha emitido avisos de búsqueda para los tres primeros; Sedaghatzadeh ha sido detenido por la policía de Malasia.
Irán negó haber hecho algo así en India, especialmente cuando Nueva Delhi está haciendo grandes esfuerzos, a pesar de la desaprobación de Estados Unidos y algunos países europeos, para desarrollar nuevos métodos para pagar el petróleo iraní. “No está en el carácter de la política iraní hacer esto. Si es así, ¿por qué elegir India? Irán podría haber seleccionado otro país”.
Los ataques en India ocurrieron cuando acababa de reemplazar a China como el mayor importador de petróleo crudo de Irán. Las importaciones habían aumentado a 550.000 barriles por día en enero de 2012. La pregunta de por qué Irán haría esto a su mayor cliente surgió después de los ataques.
De hecho, varias semanas después, una gran delegación india visitó Teherán para solicitar más importaciones de petróleo e India invitó a tres bancos iraníes a abrir sus sucursales para realizar comercio directo.
En abril de 2012, Teherán informó al Ministerio de Relaciones Exteriores de la India que “ambas partes están interesadas en colaborar”, pero no se pudo proporcionar de inmediato información sobre los tres presuntos iraníes involucrados en el ataque terrorista porque Irán había entrado en sus celebraciones de Navroz (Año Nuevo).
Parece que todos los esfuerzos diplomáticos, así como la visita de la Policía India a Teherán para obtener del gobierno iraní información sobre los presuntos autores del ataque del 13 de febrero, no han logrado ningún resultado positivo hasta hoy.
¿Cambiarán las cosas?
Un comentario destacado de Vidyanand Shetty en The Times of India del 30 de enero reanuda la discusión: “Irán no puede usar India para sus juegos sucios. Escaparon del castigo en 2012 porque tenían un gobierno amistoso. Ahora las cosas han cambiado con este acto de terrorismo contra la India y no contra Israel. El gobierno indio debería emitir una declaración contundente: cualquiera que use suelo indio será castigado”.
El primer ministro Narendra Modi condenó el reciente ataque terrorista cerca de la embajada israelí en Nueva Delhi y se comprometió a castigar a los perpetradores. Con suerte, el gobierno indio finalmente llamará a Irán al orden.
Por Ely Karmon, experto en contraterrorismo.
Fuente: JPOST
Traducción para Radio Jai Alicia Weiss
Autorizada su reproducción citando a las fuentes.
Reproducción autorizada citando la fuente con el siguiente enlace Radio JaiAyuda a RadioJAI AHORA!
HAZ CLIC AQUÍ PARA HACER UNA DONACIÓN