Profanaron la plaza embajada de Israel a la memoria del atentado en Buenos Aires
Rompieron el vidrio del recordatorio instalado en el año 2019 y extrajeron la réplica de la Menoáh.
En la coqueta esquina de Arroyo y Suipacha, en el barrio de retiro, de la ciudad porteña, se emplazaba un bello edificio de estilo, que albergaba a la sede diplomática de Israel en la Argentina hasta el atentado del 17 de marzo de 1992. El mismo había sido construido en el año 1925 por el arquitecto Alejandro Virasoro como residencia del aristócrata Enrique Lastra.
El Petit hotel que servía también como residencia del embajador en los primeros años fue adquirido por miembros de la comunidad judía y obsequiado al Estado de Israel. Su solemne y festiva inauguración fue el 23 de abril de 1950.
El 17 de marzo de 1992 a las 14.45hs un furgón Ford F-100 cargado de explosivos por un terrorista suicida se estrelló contra el edificio causando 29 muertos y 242 heridos. Fue el peor ataque contra una sede diplomática israelí en el mundo.
Después de una larga y compleja zaga, el 17 de marzo del año 2000, se inauguró un predio a la memoria en lo que se denomina “Plaza embajada de Israel, en memoria de las víctimas del atentado”. Una visita obligada para los turistas que llegan a la ciudad que a través de una App permite que los visitantes puedan conocer sobre las características del edificio que se situaba en el lugar y lo ocurrido en el atentado.
Con el paso de los años se han ido incorporando a las placas originales donde constan los nombres de las víctimas y los donantes que hicieron posible la adquisición del terreno y el memorial, 29 árboles, banquetas donde sentarse, placas conmemorativas del gobierno de la ciudad de Buenos Aires y una última del paso del Primer Ministro de Israel Binyamin Netanyahu.
En el año 2019 se realizó una significativa campaña de memoria del atentado con unos tótems que fueron instalados en las estaciones de subterráneos de la ciudad. Los mismos recreaban los escombros y algunos objetos rescatados entre los mismos. El más significativo una imponente menoráh (candelabro de 6 brazos), que fue rescatada milagrosamente intacta luego del atentado. La misma se encuentra en el ingreso de la nueva sede diplomática.
Uno de estos tótems fue emplazado luego en la plaza como recordatorio y es el que ha sido profanado. El vidrio fue roto y se extrajo del mismo la réplica en miniatura de la Menoráh. No se puede acreditar si se trata de un hecho que tenga una connotación política o antisemita o simplemente un hurto de los tantos que se dan en la ciudad en búsqueda de bronce. A partir de lo ocurrido la plaza cuenta con vigilancia policíal las 24 horas y se cierra durante las horas de la noche.
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