Cientos de personas se acercaron a donar sangre para los heridos de Meron

Magen David Adom (MADA) agradeció a los israelíes después de la donación de más de 2.200 unidades de sangre tras la tragedia en  Meron. Al menos 45 personas murieron el jueves por la noche después de que estalló una estampida cuando multitudes masivas se reunieron en la ceremonia religiosa de encendido de fogatas del Monte Meron para la festividad de Lag Ba’omer.

Se pidió al público que donara sangre en estaciones especiales de MADA instaladas en todo el país el viernes después del desastre. En pocas horas, las multitudes se reunieron y los israelíes donaron miles de unidades para las víctimas del evento y otras personas en los hospitales israelíes. Cada unidad donada puede salvar las vidas de tres pacientes, según la MADA, quien también dijo que la sangre caduca después de solo 35 días, y pidió a los israelíes que continúen donando.

Los usuarios de las redes sociales elogiaron a los ciudadanos que se unieron para ayudar a los equipos de la MADA en la plaza Rabin de Tel Aviv. Según una publicación en un grupo de Facebook de Tel Aviv, el personal de la MADA, que se centró en extraer sangre lo más rápido posible, recibió la ayuda de dos mujeres jóvenes que vinieron a donar sangre y se quedaron para ayudar a organizar a los cientos de personas que vinieron a donar después de darse cuenta de que no había ayuda para apoyar la operación.
Las mujeres organizaron a más de 400 personas esperando en largas filas y mantuvieron el proceso de donación en marcha de manera efectiva a pesar de no tener un papel oficial.

Aproximadamente 90.000, en su mayoría judíos ultraortodoxos, acudieron en masa al Monte Meron el jueves para las conmemoraciones anuales de Lag Ba’omer que incluyen oración durante toda la noche, canciones místicas y bailes. La estampida comenzó cerca de la hoguera de la secta jasídica Toldot Aharon, que tiene su sede en Jerusalén.
Unas 150 personas resultaron heridas durante la noche, y 21 siguen recibiendo tratamiento en varios hospitales del norte. Más de 250 ambulancias y seis helicópteros llamaron al lugar para evacuar a los heridos. Entre los muertos había al menos cinco menores de 16 años.

El sentimiento de solidaridad es una cualidad del pueblo judío, y en esta ocasión, sin importar si conocían a las víctimas  o no, israelíes no dudaron en en donar sngre para poder aportar un grano de arena a la recuperación de los heridos.

Sivan Gobrin desde Israel

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