¿Por qué Occidente apoya a Hamás?

Juan Felix Marteau, profesor titular regular de Criminología y director del Centro de Estudios sobre Seguridad Hemisférica, Terrorismo y Criminalidad Financiera (UBA), comenta a los oyentes acerca de su nota de opinión “Hamas y el Humanismo”.

El 27 de mayo, el Consejo de Derechos Humanos de la ONU se reunió en una sesión especial para discutir la “grave situación de derechos humanos en el territorio palestino ocupado, incluida Jerusalén oriental”. En dicha asamblea, se aprobó una resolución con 29 votos a favor, 9 en contra y 14 abstenciones, estableciendo una comisión internacional independiente para investigar, en palabras de la ONU, “presuntas violaciones y abusos de garantías […] cometidas antes y después del 13 de abril de 2021”.

Según el entrevistado, el apoyo de estados occidentales (entre ellos Argentina) a mociones que amparan organizaciones terroristas como Hamás en detraimiento de países democráticos como Israel, tiene dos motivos.

El primero de ellos, se relaciona con una “pérdida de valentía” de sus dirigentes. La misma, “se traduce en esa ambigüedad, esa ambivalencia, esa fuga constante que hace que los grupos terroristas terminen recibiendo millones de dólares para ayuda social o humanitaria política y finalmente esa ayuda es canalizada para sus actividades terroristas”.

La segunda de las razones que Marteau indica, se relaciona con la existencia de una cultura de “humanismo vacío”. El autor explana el concepto, explicándolo como “un humanismo que desubstancializa, desacraliza cualquier relación humana, anula la idea de que existen enemigos concretos a la sociedad democrática, a la cultura en la que nosotros vivimos”, cuando en realidad sí “hay enemigos que quieren negar mi identidad, que quieren imponerme una lectura extrema del Corán”.

Puntualmente en Argentina, según el profesor, estos elementos se conjugan generando que se posicione “al lado de China y de una cantidad de países africanos que primero equiparan al Estado de Israel con la agrupación Hamás terrorista… dándole el estatuto de una representación política legitima que representa al pueblo palestino”. Marteau encuentra una contradicción en la política de Argentina: “Vamos y le tocamos la puerta a Estados Unidos de rodillas para que nos condonen la deuda […] y por otro lado tomamos posiciones alineados con China y una cantidad de piases con los cuales no tenemos ninguna referencia ni cultural, ni política ni económica”. Por ello se pregunta: “¿Qué podemos ganar los argentinos con una posición del gobierno de esta naturaleza? Es inentendible”.

Por TP/RJ