Una manera de aplaudir el atentado a la AMIA

Por Eduardo Kohn

Ya comentamos hace un par de meses en esta columna que Irán había decidido cambiar de Presidente a través de un sistema que aunque allí lo llamen elecciones no es más que una designación directa de la dictadura de los Ayatollahs disfrazada de votación y hasta con un espacio que le llaman Parlamento y que al menos estructuralmente se parece a otros espacios físicos de países democráticos que sí tienen congresos, pero en serio. También señalamos entonces que el nuevo Presidente de Irán, sometido a las órdenes y directivas del Líder Supremo, sería Ebrahim Raisi.

Finalmente, Raisi asumió su cargo hace escasos días. El Canciller israelí, Yair Lapid, dijo nuevamente que “el nuevo presidente de Irán es un extremista responsable de la muerte de miles de iraníes. Está comprometido con las ambiciones nucleares del régimen y con su campaña de terror global”. Raisi fue miembro de la Comisión de la Muerte, encargada de decidir la suerte de miles de prisioneros opositores detenidos en 1988.Los asesinatos representan la mayor purga política en la historia moderna de Irán, aunque el número de víctimas -cuyas cifras en miles varían según distintas fuentes- nunca fue precisado. Para Israel fueron 30.000 personas.

En la ceremonia de asunción de Raisi asistió Enrique Mora, el negociador sobre cuestiones nucleares de la Unión Europea. El Primer Ministro Naftalí Bennett señaló: “Le digo a la Unión Europea: no se puede hablar de derechos humanos y al mismo tiempo rendir homenaje a un asesino, un verdugo, que asesinó a cientos de opositores al régimen”. Nueve diputados del Parlamento Europeo han criticado al jefe de la política exterior de la UE, Josep Borrell, por enviar a un alto diplomático a la ceremonia de investidura del nuevo presidente iraní. “Enviar a una representación de tan alto nivel a la toma de posesión de un presidente con un historial tan oscuro, en este momento tan delicado, contradice los compromisos europeos de defender los derechos humanos”, escribieron los eurodiputados. Agregaron: “No es muy apropiado honrar la investidura del presidente Raisi con la presencia de uno de los diplomáticos más veteranos de la UE. Parece aún más incongruente, dado el papel de alto nivel del Sr. Mora en la coordinación de las conversaciones nucleares en Viena. Su presencia corre el riesgo de dar la impresión de que la principal preocupación de la UE es el acuerdo nuclear, hasta el punto de ignorar los graves abusos de los derechos humanos en Irán.”

En declaraciones al Times of Israel, el eurodiputado sueco David Lega fue tajante: “Si queremos decir lo que decimos sobre los valores europeos en materia de derechos humanos, sobre el respeto al Estado de Derecho, también tenemos que demostrarlo con nuestros actos”.

También hubo una declaración contundente de movimientos que representan la oposición en Irán y grupos de DDHH de la región: Partido Komala del Kurdistán iraní, el Partido Democrático del Kurdistán iraní, el Movimiento por un Baluchistán Libre, el Partido de Solidaridad Democrática de Al Ahwaz, el Partido Popular del Baluchistán y el Partido Democrático Azerbayano Birliyi-Birlik, la Unión Siria Europea, la Organización de Jóvenes del Kurdistán iraní,y la Organización de Derechos Humanos Hana. Señalan: “No ha habido ningún representante de la UE en la toma de posesión de Lukashenko como presidente de Bielorrusia. ¿Por qué envía ahora la UE un representante a la toma de posesión de Raisi? Nuestra pregunta es si nosotros, como personas de Asia Central, somos vistos como menos valiosos que las personas de Bielorrusia. ¿Está eligiendo la UE un enfoque diferente basado en la raza?. Instamos a la UE a que defienda sus propios principios, que redundan en beneficio tanto de los ciudadanos de la UE como de los iraníes y de todos los pueblos oprimidos por este régimen”.

La periodista y activista iraní Masih Alinejad también condenó la decisión de la UE en un vídeo que publicó en Internet. “Estoy furiosa al saber que Enrique Mora, secretario general adjunto de la UE, ha asistido a la ceremonia de investidura de Ebrahim Raisi. Esto da poder a Raisi, que ha cometido crímenes contra la humanidad, para matar a más gente”.

Una semana después de asumir, Raisi presentó ayer su propuesta de gabinete ministerial a lo que él denomina parlamento o lo que fuera. Y el Ministro del Interior será Ahmad Vahidi, que hasta ahora era comandante de la Universidad Nacional de la Defensa.

De acuerdo a la investigación del asesinado Fiscal de la causa AMIA Alberto Nisman, Vahidi, en su calidad de comandante de las Fuerza Quds, la brigada expedicionaria de la poderosa Guardia Revolucionaria Islámica, “participó en la reunión en que se decidió hacer el atentado en la Argentina y en la que se encomendó a la milicia libanesa Hezbollah su ejecución”. Vahidi figura desde 2007 en las “alertas rojas” emitidas por Interpol para su detención, junto a Imad Fayez Mughniyah, Alí Fallahijan, Mohsen Rabbani, Ahmad Reza Asghari, y Mohsen Rezai.

En 2011, cuando era Ministro de Defensa, Vahidi visitó Bolivia y se mostró en varios actos públicos. Con mucha parsimonia la Cancillería argentina de entonces le pidió a Evo Morales su expulsión. Pero viajaba con pasaporte diplomático, por lo que tenía inmunidad frente al pedido de captura de la Interpol. Evo Morales hizo que lo expulsaba después de negociar todas las turbiedades de la época, y la Cancillería argentina hizo como que aceptaba las excusas de Morales por la descarada demora en echarlo.

Pese a su formación como ingeniero industrial, Vahidi, nacido en 1958, desarrolló toda su carrera pública en el área de Defensa, desde que se sumó a la Guardia Revolucionaria Islámica en 1980, de la que fue uno de sus comandantes durante la guerra con Irak, entre 1980 y 1988. Entre otros cargos ha sido viceministro y ministro de Defensa, durante el gobierno de Mahmoud Ahmadinejad, y director del Centro de Investigación de Defensa Estratégica de 2013 a 2016.

Su cargo más significativo respecto a las acusaciones de su participación en el atentado a la AMIA es el de comandante de la Fuerza Quds, una unidad de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica especializada en guerra no convencional y operaciones de inteligencia militar. La Quds es responsable de llevar a cabo “operaciones extraterritoriales”. Está vinculada con Hezbollah y las milicias chiitas en Irak y en Afganistán. La Fuerza Quds apoya y asesora en lugar de participar directamente, lo que permite a Irán negar toda participación. Hoy tiene 10 mil reclutas.

En suma: Irán tiene un asesino serial como Presidente; Europa se hace la distraída, y por si alguien se confunde con la realidad que anda por ahí repartiendo bofetadas, Vahidi sigue siendo un jerarca del régimen porque un atentado como el de la AMIA en un régimen como el de los Ayatollahs, retribuye de por vida. Nada debería ser sorpresa ante estos hechos. Tampoco la estulticia que llegará en cualquier momento cuando a los que se hacen los diplomáticos y endosan dictadores con presencias deleznables en ceremonias medievales, les estallen sus maniobras en la cara.