Preocupación en la comunidad judía de Munich por incidentes antisemitas

Dos incidentes antisemitas esta semana en la ciudad alemana de Múnich han alarmado a líderes judíos y políticos locales, lo que ha llevado a un alto funcionario a llamar al público para que muestre una mayor “vigilancia”.

El miércoles por la mañana, trabajadores de la construcción que estaban construyendo un nuevo hogar de ancianos judío en el exclusivo distrito de Bogenhausen de la ciudad llegaron al lugar de la construcción y lo encontraron destrozado con esvásticas y otros símbolos nazis y supremacistas blancos. Un portavoz de la policía dijo a los medios de comunicación locales que debido a que el sitio de construcción no contenía ninguna indicación visual de una conexión con la comunidad judía, los vándalos habrían sido conscientes de este hecho de forma independiente. Su probable intención era “dejar una amenaza para los futuros residentes con el grafiti”, dijo el vocero.

Más tarde, el miércoles por la noche, un hombre de 41 años fue arrestado inmediatamente después de una manifestación contra las políticas COVID-19 del gobierno alemán. Se dijo que el hombre era parte de un grupo de 20 personas que se dirigían en dirección al Centro Comunitario Judío de Múnich.

Según el periódico Suddeutsche Zeitung (SZ) , los testigos identificaron a uno de los miembros del grupo como Karl-Heinz Statzberger, un terrorista neonazi convicto que cumplió una condena de cuatro años de prisión por su participación en la planificación de un intento de atentado contra el Centro Comunitario Judío en 2003. Se informa que Statzberger está activo en la sucursal de Baviera de “The Third Way”, una organización neonazi que ha difundido su mensaje en manifestaciones y mítines contra las medidas de salud pública pandémicas. “Distribuimos folletos y somos simplemente parte del gran flujo”, escribió uno de los partidarios del grupo en una publicación en las redes sociales esta semana. “Estaremos allí, sin importar si les conviene a todos o no. ¡La resistencia está creciendo! ¡Esperanos!”

Fuente: Algemeiner