Bennett y Barlev visitan la reapertura de un bar en Tel Aviv atacado en un mortal ataque terrorista

Solo 4 días después del ataque, 100 personas asisten a la reapertura llenas de música y bebida mientras los clientes juran que el terror no ganará; PM: ‘No dejaremos que ellos, nuestros enemigos, detengan nuestras vidas’

El primer ministro Naftali Bennett y el ministro de Seguridad Interna, Omer Balev, se encontraban entre las docenas de personas que acudieron al bar Ilka de Tel Aviv cuando reabrió el lunes, solo cuatro noches después de que un terrorista abriera fuego en el sitio, matando a 3 e hiriendo a 13.

“Vine aquí esta noche para dar fuerza a los dueños del bar ya los residentes locales. Un evento realmente difícil sucedió aquí, personas fueron asesinadas aquí, personas resultaron heridas aquí, buenas personas”, dijo Benett mientras hablaba con los clientes del bar un poco antes de la medianoche del lunes por la noche.

“No dejaremos que ellos, nuestros enemigos, detengan nuestras vidas.

No dejaremos que nos derroten. Estamos volviendo a la vida y al mismo tiempo estamos luchando en sus lugares, en sus bases, sus recursos y, con la ayuda de Dios, ganaremos”, dijo Bennett, diciéndole a la gente en el bar que “los amaba mucho, mucho.”

Durante su tiempo en el bar, el primer ministro encendió velas en memoria de Tomer Morad, Eytam Magini y Barak Lufan, quienes fueron asesinados a tiros mientras estaban sentados en el bar de la calle Dizengoff, en el centro de la ciudad, el jueves por la noche.

También habló con miembros de la multitud y los dueños del bar y se sentó por un momento con un hombre que le dijo que había resultado herido en el último ataque en la calle Dizengoff de Tel Aviv, que tuvo lugar en 2016 a unos 200 metros (yardas) por la la carretera.

Más de 100 personas se apiñaron en Ilka, con la multitud desbordando la presencia normal en la acera del bar.

Con la música sonando y las bebidas fluyendo, era difícil comprender que el sitio había sido una escena de carnicería y destrucción hace solo cuatro días.

Los visitantes se hicieron eco del mensaje de Bennett de que el terror no debe detener la vida.

“Vinimos aquí esta noche para mostrar nuestro apoyo”, dijo Hani, un trabajador de alta tecnología druso de unos 20 años que vino a Ilka con amigos.

“Si tenemos miedo, nuestra situación no será mejor. Tenemos que seguir viviendo”, dijo Gilad Harel, de 22 años, al sitio de noticias Ynet. “Este fenómeno en el que volvemos a nuestras rutinas diarias es saludable porque tenemos que volver a la normalidad y no dejar que (el terror) gane”.

“Sin embargo, tenemos que recordar a los que fueron asesinados”, dijo.

También visitó el bar el ministro de policía Barlev.

“Junto al terrible dolor y la pérdida de vidas, esta noche, en un pub lleno de vida, vemos nuestra gran fortaleza, nuestra mirada hacia el futuro, el conocimiento de que incluso si nos lastiman, no nos romperemos”, escribió en Twitter. “Seguiremos viviendo, floreciendo y floreciendo. Ganaremos.”

Fuente: The Times of Israel