Paracaidistas judíos en los cielos de Europa

Por el Prof. Yehuda Krell

El 25 de abril de 1920 nació Abba Berdichev, fue un paracaidista judío que actuó detrás de las líneas enemigas en la Europa ocupada por el nazismo durante la Segunda Guerra Mundial.

Berdychev nació en Galati, Rumania, hijo de una familia jasídica, que desde temprana edad fue seducido por el sionismo y el amor a Israel. En su adolescencia, fue miembro del movimiento juvenil ‘Hanoar Hatzioní’ rumano y participó en la Hajshará, una granja de capacitación agrícola, para preparar su inmigración a la Tierra de Israel. En 1940 abordó el barco de ‘maapilim’, inmigrantes ilegales, ‘Daryan 2’ en un viaje que duró cuatro meses y medio, al acercarse a las costas del país, los británicos capturaron la nave y encarcelaron a los inmigrantes ilegales durante aproximadamente un año y medio en los campos de detención de Mazra y de Atlit.

En noviembre de 1943 Berdichev se ofreció de voluntario para integrar un grupo de paracaidistas con la intención de incursionar en suelo europeo como parte de la lucha contra la Alemania nazi. Con ese fin, se integró como miembro de la Haganá y fue entrenado por el ejército británico para la misión, se le dio una identidad falsa con el nombre de ‘Sargento Robert Willis’.

El 15 de marzo de 1944 desembarcó en Yugoslavia junto con Hanna Szenes, Reuven Daphni y Jona Rozen. A Berdichev se le había asignado la misión de penetrar en Rumania, su tierra natal, y ayudar a los judíos en la lucha por su existencia. Los británicos le asignaron tareas de inteligencia y el rescate de tripulaciones aéreas que habían sido capturadas o abandonadas en suelo rumano. Al fracasar el intento en llegar a Rumania, en agosto de 1944, partió a otra misión en Eslovaquia, junto con una delegación británica y una delegación estadounidense. En su camino, en Hungría, se encontraron con una emboscada nazi y el grupo huyó a las montañas. Los alemanes lanzaron una salvaje persecución y los capturaron dos meses después.

Berdychev fue trasladado, junto con otros prisioneros de guerra, al campo de concentración de Mauthausen donde fue cruelmente interrogado. Fue ejecutado por los nazis el 26 de enero de 1945. Su cuerpo nunca fue encontrado, en su memoria se preparó en el cementerio militar del Monte Herzl en Jerusalén una tumba vacía en el sector de honor a los paracaidistas judíos que cayeron en Europa.

Abba Berdichev fue uno de los 250 hombres y mujeres judíos que durante la guerra se ofrecieron como voluntarios para las operaciones dirigidas por las organizaciones británicas MI9 y el Ejecutivo de Operaciones Especiales. De ellos fueron seleccionados 37, quienes fueron enviados a lanzarse en paracaídas detrás de las filas enemigas entre los años 1943 y 1945.

Como Berdichev, la mayoría de los seleccionados eran parte de una juventud jalutziana emigrada de Europa que tenían conocimiento de primera mano de los países a los que eran enviados. El plan consistía en que estos muchachos y muchachas podían ser entrenados especialmente y enviados a sus ciudades europeas para rescatar refugiados, ya que dominaban a la perfección los idiomas, las costumbres y la geografía local, por lo que podían operar de manera encubierta y encontrar a todo aquel que se escondiera.

Asombra la capacidad y el tesón con el que actuaron estos valientes hombres y mujeres: tres de los paracaidistas se infiltraron en Hungría, cinco participaron en el levantamiento nacional eslovaco en octubre de 1944, seis operaron en el norte de Italia, diez paracaidistas sirvieron en misiones de enlace británicas con partisanos yugoslavos, nueve operaron en Rumania, dos entraron en Bulgaria, uno operó en Franica y otro en Austria. Doce de ellos fueron capturados y siete murieron.

En el testamento que Abba Berdichev dejó para su familia, escribió: ‘A todos ustedes, por favor, no lloren. A los desafortunados se los llora. Estoy feliz de que me haya tocado a mí ser un elegido del yshuv, de llevar su mensaje, su aliento, y su ayuda a los judíos de la diáspora’.