Recordando al Rabino Lord Jonathan Sacks y su vínculo con la Reina Isabel II

Acercándonos al segundo aniversario del fallecimiento de quien fuera una de las figuras más importantes del pueblo judío del último siglo, el rabino Lord Jonathan Sacks, dialogamos con el rabino Joseph Dweck, Rabino Principal de la congregación de judíos españoles y portugueses de la Comunidad Sefaradí del Reino Unido, quien lo recordó con mucha emoción:

“Rav. Sacks fue una persona que tuvo una enorme capacidad para decir, para escribir de un modo maravilloso, para transmitir sus ideas de manera muy profunda”. Dijo que su potente mensaje, sus brillantes clases, escritas en inglés y que podemos encontrar en la web traducidas a muchos idiomas, tuvieron y tienen  una influencia muy fuerte en el judaísmo de Inglaterra y del mundo en general.

Sostiene Dweck que existen muchas razones del porqué de esa influencia; que la primera de ellas es que Rav Sacks fue un gran académico, quien no solo fue un gran conocedor de los textos sagrados, sino también de la Filosofía, y que, por ello, podía captar en profundidad esos textos para poder traducirlos y plantearlos, siempre sabiendo llegar a la audiencia, cualquiera fuera ella, con las palabras justas.

El segundo motivo por el cual la figura del rabino Sacks fue tan importante, fue que supo vivir en este mundo, en el que se suele preguntar sobre la vigencia del judaísmo, un mundo en el que incluso se cuestiona a la religión, y que, frente a ello,  tenía la capacidad de dar respuestas a estos interrogantes de manera brillante, y que, por eso, entre otras muchas cosas, fue tan respetado y querido por las comunidades judías: Tenía la enorme sabiduría para poder mostrar hasta dónde justamente en este mundo, se requiere de la vigencia absoluta del judaísmo como elemento fundamental para la vida.  La tercera razón, según su opinión, es que Rav Sacks santificó a D-os con su figura, y que, en los últimos veinte años, se dedicó, además de hablarle a la comunidad judía, de transmitirle sus enseñanzas, a convertirse en embajador del pueblo judío para los no judíos, a quienes pudo mostrarles la profundidad, la belleza, y los valores del judaísmo como herramientas para este mundo, brindando respuestas a los grandes interrogantes de la humanidad.

Destaca el Gran Rabino Dweck el profundo respeto que el rabino Sacks inspiraba en personalidades muy importantes, como  la recientemente fallecida, reina Elizabeth, con el ya ungido rey Carlos III, con primeros ministros de Gran Bretaña. “Fue una figura admirada y querida para los británicos”, remarcó.

El rabino Dweck indicó que Rav Sack, como Gran Rabino de Gran Bretaña tuvo la oportunidad de celebrar muchos encuentros con la Reina, por la que tenía un alto aprecio y respeto, que veía en ella cualidades de enorme servicio a su pueblo, a alguien que marcaba la necesidad de que Gran Bretaña tuviera un nivel de tolerancia, de aceptación de las diferencias, sabiendo que Inglaterra oficialmente es un país anglicano, a partir de la época de Enrique VIII, y que por lo tanto la Corona representaba esa fe; pero que ello, de ninguna manera fue un impedimento para que hubiera diálogo. En ese escenario, el rabino Sacks gozaba de mucha aceptación para poder plantear ese mundo de Gran Bretaña en donde todos pueden convivir en las diferencias.

El Gran Rabino Sefardi, quien confesó extrañar mucho a Rav Jonathan Sacks, agradecido por la posibilidad de recordarlo e invita a quienes lo deseen seguir sus shiurim (clases), hacerlo en su página: www.seniorrabbi.com