Parar para saber orientar nuestro andar

La Toráh en su sabiduría nos ofrece siempre antes de Rosh Hashaná las porciones de Nitzavim y Vaielej. La primera comienza diciendo “Uds estáis hoy todos erguidos delante de vuestro D.S”. “Todos”, sin excepción, pasaremos delante de nuestro Creador en el día de Rosh Hashaná, el día del juicio. No hay persona que pueda evadir el escrutinio Divino. Se nos convoca a estar erguidos, detenidos. Es imprescindible para poder pararse ante el tribunal celestial, primero detener nuestro andar para revisar nuestro camino. Hacer Teshuvá, arrepentirse, retornar, corregir, dar respuesta, pedir perdón y perdonar, reparar. Solo luego de ese parate imprescindible en medio del correr tantas veces sin sentido ni rumbo se nos dirá Vayelej, camina sabiendo el rumbo y el objetivo al que queremos apuntar.

La diferencia entre el Ser Humano y el resto del reino animal es la racionalidad que nos hace poder evaluar nuestro andar y que no sea solo el instinto el que nos guie.

Escuche las reflexiones del director de Radio Jai cuando nos encontramos en la recta final de este año 5783