‘¡Capturé uno!’ — Grabaciones de las FDI muestran a más empleados de la UNRWA alardeando de los crímenes del 7 de octubre

2 trabajadores más acusados ​​de participar en ataques elevan el número a 14; Las FDI dicen que la información muestra que 450 empleados son agentes terroristas; El jefe del organismo de la ONU advierte que está en un “punto de ruptura”.

El lunes, las FDI publicaron grabaciones de audio que, según dice, incriminan a dos empleados adicionales de la UNRWA que supuestamente participaron en el ataque liderado por Hamas el 7 de octubre, lo que eleva a 14 el número total de trabajadores de agencias que, según Jerusalén, participaron activamente en los ataques.

“Estoy dentro, estoy dentro con los judíos”, se oye decir en una grabación a Mamdouh al-Qali, un terrorista de la Jihad Islámica que, según las FDI, trabajaba como profesor en una escuela de la UNRWA.

“¿Cómo llegarás a casa?” le preguntan en la llamada telefónica, y él responde riendo: “Cuando me muera”.

En otra grabación, supuestamente se puede escuchar a un maestro de la UNRWA alardear de haber secuestrado a rehenes israelíes.

“Tenemos mujeres rehenes, ¡capturé una!” dice Yousef al-Hawajara, un terrorista de Hamás que trabajó como profesor en una escuela de la UNRWA en Deir al-Balah, según las FDI. “Espero que todo esté bien”, dice más tarde en la grabación. “Entraremos en la mezquita de Al-Aqsa”.

Dice que entró en Israel y “vio los espectáculos… les dispararon en los ojos… hicieron acciones de liberación… Dios quiere”. Cuando se le pregunta qué encontró mientras estuvo en Israel, dice: “Mil shekels”.

El portavoz de las FDI, el contralmirante Daniel Hagari, dijo en una conferencia de prensa vespertina que a pesar del “contenido difícil”, el ejército decidió publicar las grabaciones de audio para “recordar y no olvidar”.

“La masacre cometida por Hamás el 7 de octubre es la masacre más documentada de la historia. Los terroristas de Hamás filmaron su propia crueldad. Conforme va pasando el tiempo se van revelando más testimonios, cada día más inteligencia”, afirmó.

Dijo que en una de las grabaciones, un terrorista de Hamás que trabajaba como profesor en una escuela de la UNRWA en Deir al-Balah, le dice a su amigo que capturó una “sabaya”, término utilizado por los yihadistas del Estado Islámico que significa esclava sexual.

“El uso más difícil de ‘sabaya’ fue por parte de los terroristas de ISIS, que llamaron así a las mujeres yazidíes capturadas [en Irak y Siria]”, añadió Hagari.

“En la conversación, el terrorista al otro lado de la línea describe a una mujer como una yegua noble”, dijo.

Tales comentarios “nos mantienen despiertos por la noche y requieren que el mundo grite, como lo hizo con las mujeres yazidíes”.

"Tenemos cautivos, atrapé a uno": las FDI publicaron grabaciones incriminatorias de profesores de la UNRWA que participaron en la masacre del 7 de octubre pic.twitter.com/nPu1KNUHyH

— Radio Jai (@fmjai) March 4, 2024

Hagari añadió que a partir de los testimonios de los rehenes que fueron liberados de Gaza, “hemos aprendido sobre los peligros a los que están expuestos los rehenes, especialmente las mujeres y los niños”.

El mes pasado, el Ministro de Defensa, Yoav Gallant, nombró a otros 12 empleados de la UNRWA que, según dijo, participaron en la masacre del 7 de octubre. Las FDI dijeron que su inteligencia muestra que unos 450 agentes terroristas en Gaza, en su mayoría miembros de Hamas, también son empleados de la UNRWA.

Jerusalén ha sostenido durante mucho tiempo que la UNRWA debería disolverse, y las recientes acusaciones han llevado a varios países donantes a anunciar congelaciones de fondos, aumentando la preocupación de que la agencia, que dice ser el principal conducto de ayuda para millones de personas en la Franja durante la guerra entre Israel y Hamas, podría dejar de operar en Gaza y otras partes de Oriente Medio en unas semanas.

El jefe de la UNRWA, Philippe Lazzarini, advirtió el lunes en una carta al presidente de la Asamblea General que su agencia está en un “punto de quiebre”, mientras los donantes congelan la financiación, Israel ejerce presión para desmantelar la agencia y las necesidades humanitarias se disparan.

La capacidad de la UNRWA para llevar a cabo su mandato está “seriamente amenazada”, dijo Lazzarini, instando a los estados miembros a “brindar el apoyo político necesario para sostener” la agencia.

Lazzarini ha dicho que Israel no ha aportado pruebas contra sus ex empleados. El mes pasado, Israel reveló las identidades de 12 empleados de la UNRWA que, según dijo, “participaron activamente” en la masacre.

A pesar de la afirmación de Lazzarini, la ONU despidió a los empleados acusados ​​por Israel y comenzó una investigación interna.

Algunos rehenes, que fueron liberados de Gaza durante una tregua de una semana en noviembre, también afirmaron que estaban retenidos en casas de miembros de la UNRWA. Las FDI también revelaron  en febrero que Hamás escondió un gran centro de datos subterráneo directamente debajo del edificio de la sede de la UNRWA en Gaza, en la ciudad de Gaza. Se encontró una entrada a la fortaleza debajo de una escuela cercana de la UNRWA.

Varios países, incluidos Estados Unidos, Gran Bretaña, Alemania y Japón, suspendieron la financiación a la UNRWA tras las acusaciones israelíes. El total congelado asciende a 450 millones de dólares, el equivalente a más de la mitad de los fondos que la UNRWA recibió en 2023.

El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, también encargó a un panel independiente que evalúe si la UNRWA actúa de manera neutral en el conflicto palestino-israelí.

La Comisión Europea, reconociendo las medidas adoptadas por la ONU y su agencia para los refugiados, dijo el viernes que liberaría 50 millones de euros (54 millones de dólares) en financiación de la UNRWA.

Estados Unidos, el principal contribuyente de la agencia crónicamente insuficientemente financiada, fue uno de los primeros países en suspender la ayuda. Desvió algunos fondos a otras agencias de la ONU.

Pero Guterres ha insistido en que ninguna otra agencia tiene capacidad para sustituir a la UNRWA, que, además de proporcionar ayuda humanitaria, gestiona escuelas y hospitales.

ONG como Save the Children y Acción contra el Hambre hicieron lo mismo en una declaración conjunta, advirtiendo sobre el “colapso total” de la respuesta humanitaria en Gaza, donde la escasez de alimentos y agua es generalizada.

La UNRWA emplea a unas 30.000 personas en los territorios ocupados, el Líbano, Jordania y Siria, y a unas 13.000 personas en la Franja de Gaza.