891 soldados de las FDI han caído desde el 7 de octubre, la cifra más alta desde la guerra de Yom Kippur

Las FDI observaron un preocupante aumento de presuntos suicidios, que pasaron de 14 en 2022 a 17 en 2023 y 21 en 2024, la mayoría de los cuales ocurrieron después de que comenzara la guerra.

Desde la masacre del 7 de octubre perpetrada por Hamás, las Fuerzas de Defensa de Israel han registrado 891 bajas entre sus soldados, según cifras publicadas el jueves, lo que supone la cifra de muertos más alta del ejército desde la Guerra de Yom Kippur.

Las 891 víctimas incluyen muertes por actividades operativas, accidentes y presuntos suicidios.

En 2023, cayeron 558 soldados, de los cuales 512 murieron durante la actividad operativa, incluidos 329 el 7 de octubre. Otros 16 murieron en accidentes, como incidentes en la carretera y en entrenamientos, mientras que 17 casos fueron investigados como presuntos suicidios.

Entre ellos había siete soldados en servicio activo, cuatro en servicio regular y seis en la reserva.

En 2024, murieron 363 soldados, de los cuales 295 fallecieron en operaciones y 23 en accidentes, la mayoría relacionados con la carretera. Se investigaron 21 casos como presuntos suicidios, 12 de ellos entre reservistas.

Las FDI también observaron un preocupante aumento de los casos de suicidio. En 2022, hubo 14 suicidios sospechosos, cifra que aumentó a 17 en 2023 y 21 en 2024. La mayoría de los suicidios se produjeron después de que comenzara la guerra.

El ejército agregó que una línea directa de salud mental para soldados, disponible las 24 horas del día, los 7 días de la semana, ha recibido más de 3.900 llamadas desde su lanzamiento en octubre de 2023.

El ejército también ha reclutado a 800 oficiales de salud mental, ha ampliado los servicios de salud mental y ha creado una clínica dedicada al personal en servicio activo.

Los comandantes también están entrenados para reconocer señales de angustia, y las reuniones informativas exhaustivas posteriores a la misión tienen como objetivo reforzar la resiliencia mental de los soldados.

En un fallo histórico, el Tribunal Superior de Justicia de Israel aprobó en diciembre un entierro militar en un cementerio civil para el mayor (res.) Asaf Dagan, un navegante de la Fuerza Aérea de Israel que se suicidó en octubre después de luchar contra un severo trastorno de estrés postraumático.

Tradicionalmente, las normas militares israelíes reservan los entierros militares completos en cementerios militares para los soldados que mueren en servicio activo. La batalla legal de la familia por un entierro militar se convirtió en un caso de alto perfil.

El conflicto también ha visto un aumento en las muertes por accidentes operacionales. Sesenta soldados murieron en Gaza y cinco en Líbano debido a accidentes como disparos fallidos y mal funcionamiento del equipo. El ejército dijo que cada caso se investiga y que los hallazgos se utilizan para mejorar los protocolos de seguridad.

El martes, el sargento mayor Yuval Shoham, de 22 años, murió al ser alcanzado por la rotación de la torreta del tanque en el que se encontraba durante una operación en la zona de Jabaliya, en el norte de Gaza.

La guerra marca el mayor número de muertes en el ejército israelí desde la Guerra de Yom Kippur, cuando al menos 2.500 soldados murieron en 19 días de combates.

Al menos 1.200 personas murieron y 252 israelíes y extranjeros fueron tomados como rehenes en los ataques de Hamás contra comunidades israelíes cercanas a la frontera de Gaza el 7 de octubre. De los 97 rehenes restantes, más de 30 han sido declarados muertos.

Hamás también mantiene cautivos a dos civiles israelíes desde 2014 y 2015, y los cuerpos de dos soldados muertos en 2014.

Fuente: World Israel News