El arte de Medio Oriente es tirar la cuerda sin que se rompa – Roxana Levinson

La incertidumbre domina el escenario en Medio Oriente, con negociaciones estancadas para la liberación de los rehenes israelíes en manos de Hamás. Mientras los mediadores intentan salvar el acuerdo, el gabinete de seguridad de Israel enfrenta mensajes contradictorios, especialmente tras el ultimátum de Donald Trump, que dejó más preguntas que respuestas.

La periodista Roxana Levinson, especialista en la actualidad israelí, señala que “en este tira y afloje, el gran problema es que hay tantas vidas en juego que quizás ya sería hora de cambiar las estrategias”.

El conflicto se extiende más allá de Gaza. En el Líbano, el ejército israelí prepara su salida del sur del país, buscando evitar que Hezbollah se rearme en la zona. En paralelo, el gobierno libanés ha experimentado cambios políticos que han debilitado la influencia de Hezbollah, en lo que podría marcar un nuevo rumbo en la región. Por otro lado, Irán atraviesa una crisis económica que incluso ha afectado el funcionamiento cotidiano del país.

Trump también ha propuesto un plan de reubicación de palestinos en Egipto y Jordania, lo que ha generado incomodidad en los líderes de ambos países. Mientras que el rey Abdullah de Jordania evitó pronunciarse directamente sobre el tema, aceptó recibir a 2.000 niños enfermos de Gaza. En Egipto, la resistencia a la idea es aún mayor, ya que el sentimiento propalestino dentro del país podría desestabilizar al gobierno de Abdel Fattah al-Sisi.

Las negociaciones con Hamás han atravesado múltiples crisis, pero la actual situación expone una nueva escalada de tensiones con un desenlace incierto. Mientras Israel evalúa sus próximos pasos, los mediadores buscan evitar un colapso del acuerdo. “Las partes se van subiendo a un árbol más alto y después no saben cómo bajar”, advierte Roxana Levinson, reflejando el desafío de evitar que las palabras se conviertan en acciones irreversibles.

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